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Rigau asegura que hará 21 residencias para enfermos mentales antes de 2003

La consejera clausura en Badalona el Día Mundial de la Salud Mental

La consejera de Bienestar Social, Irene Rigau, anunció ayer que antes de finalilzar esta legislatura, en 2003, Cataluña tendrá 24 hogares residencia para enfermos mentales, con lo que se cubrirá el 80% de la demanda actual, informa Efe. Ahora existen tres residencias de este tipo en Cataluña (Manresa, Barcelona y Sant Vicenc dels Horts). Rigau, que acudió al acto de clausura del Día Mundial de la Salud Mental celebrado en Badalona, explicó que en los próximos seis meses se inaugurarán cinco residencias más.

La Generalitat, por otra parte, desarrolla desde finales del año pasado un plan de reconversión de los hospitales psiquiátricos catalanes que prevé una inversión de 7.600 millones de pesetas hasta finales de 2004. Este plan se desarrolla de acuerdo con el convenio firmado en septiembre de 1999 con el Grup Pere Mata (que gestiona el Instituto Pere Mata y el Sanatorio Villablanca de Reus), el hospital psiquiátrico de Salt (Girona), el Sant Joan de Déu (Sant Boi de Llobregat), el complejo asistencial Benito Menni (también de Sant Boi) y los Servicios de Salud Mental Sagrat Cor de Martorell.Durante las jornadas convocadas con motivo del Día Mundial de la Salud Mental, los expertos participantes debatieron sobre la situación de los enfermos mentales en Cataluña y destacaron que la incidencia de estas patologías es bastante más alta de lo que podría parecer a priori. Según estos especialistas, el 3% de la población catalana sufre trastornos mentales severos, lo que equivale a una cifra de unas 150.000 personas. De estos enfermos graves, un 1% padece esquizofrenia, una enfermedad incurable, aunque el enfermo puede llegar a hacer vida normal si se le estabiliza el proceso y éste tiene un grado no demasiado profundo.

Otra cifra aportada en las jornadas es que una de cada cuatro personas necesitará durante algún momento de su vida atención psiquiátrica o mental. Según la presidenta de la Federación Catalana de Asociaciones de Familiares de Enfermos Mentales, Silvestra Moreno, "la principal necesidad que se detecta en este momento es la de integrar laboralmente a los enfermos mentales, porque ahora la integración es muy insuficiente".

El consejero de Trabajo, Lluís Franco, que también asistió a la clausura de las jornadas, reconoció que actualmente "sólo hay 150 personas con enfermedades mentales trabajando en centros especiales". En cuanto a la presencia de enfermos mentales en empresas convencionales, según Silvestra Moreno, "es mínima, a pesar de que no existen datos específicos". "El problema", según Moreno, "es que incluso en las empresas en que se contrata algún enfermo mental y se observa que trabaja correctamente, se suele evitar difundir ese hecho". Según explicó Moreno, estas empresas mantienen al trabajador en su puesto "pero sin hablar del tema, puesto que a los empresarios no les gusta decir que en su empresa trabaja un enfermo mental; todavía no se han superado esos tabúes". Moreno se quejó también de que actualmente "la sanidad pública no cubre todas las necesidades de los enfermos mentales". El consejero de Sanidad, Eduard Rius, que también participó en la clausura, aseguró que "las enfermedades mentales son uno de los principales problemas de salud de hoy en día". Según Rius, "la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado que estas enfermedades serán las más importantes en la sociedad occidental en breve, debido a los cambios vertiginosos que experimenta la propia sociedad".

Carmen Secanella
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