800 delitos, 176 detenidos

Durante los primeros ocho meses del año, 20 agentes han logrado fichar a más de un centenar de delincuentes especializados en el atraco a turistas que pasean por el centro de la capital madrileña. Uno de los objetivos prioritarios del grupo de policías que trabaja para proteger a los turistas de los asaltos callejeros es reunir todas las pruebas del delito necesarias para que los jueces tengan evidencias y testimonios suficientes de las víctimas antes de que éstas abandonen España.

Con esto se pretende evitar que los delitos queden impunes, como era habitual hasta ahora, debido a que los turistas no suelen volver a España a testificar en los juicios, y sus atracadores salen en libertad ante la falta de testigos que acrediten que han cometido el delito que se les imputa.

La Operación Verano se ha cerrado este año con 176 personas detenidas en 60 días por tirones, robos y hurtos, la mayoría a extranjeros. El 90% de los delincuentes son inmigrantes, según los datos manejados por la policía.

En estos dos meses de julio y agosto se ha identificado a 6.858 personas y se han denunciado unos ochocientos delitos. También ha habido un centenar de aprehensiones de droga y han sido requisadas 150 armas blancas.

Para la Operación Verano 2000, la policía tuvo que reclutar a 300 agentes ofreciéndoles una paga extra de 98.000 pesetas a cambio de que retrasasen sus vacaciones estivales hasta el otoño.