Rodrigo: "No hubo blanqueo"

Jose Ignacio Rodrigo, presidente de Funespaña, descalificó ayer el informe de la policía francesa sobre sus gestiones bancarias en Biarritz: "Está mal hecho, no hablaron conmigo; no hubo blanqueo de dinero". La empresa de Rodrigo, Inver Services, a través de la sucursal del Barclays Bank en Biarritz, pidió un crédito de 140 millones, que acabaron en Funespaña, pese a que tenía 200 millones, que recibió de una transferencia hecha desde el Banco Árabe Español de Madrid unos meses antes.Rodrigo no fue ayer capaz de precisar el origen de los 200 millones que viajan de Madrid a sus cuentas en Biarritz. Esta cifra coincide con el dinero que ofertó en noviembre de 1992 Funespaña al Ayuntamiento para cubrir el supuesto neto patrimonial de la funeraria, pero Rodrigo niega todo vínculo entre esta suma y tal aportación con la que se pagó la adjudicación. "Ese dinero no tiene nada que ver con Funespaña. Es un dinero que recibió mi empresa Inver Services en Biarritz por unos pagos de unas operaciones inmobiliarias y de seguros. No recuerdo, a estas alturas, cuáles, pero fueron perfectamente legales y, desde luego, están perfectamente documentadas".

El siguiente paso que alarmó a los policías franceses -¿por qué pidió su empresa un crédito de 140 millones cuando disponía de 200 en la misma cuenta?- lo explica así. "Mi empresa pidió un crédito de 140 millones en febrero de 1993 para una ampliación de capital en Funespaña. Y el dinero que ya estaba en esa cuenta [200 millones] no se utilizó porque estaba a plazo fijo. No se ofreció como aval, sino que el banco lo consideró como tal, aunque el crédito ya estaba garantizado con las acciones que yo poseía entonces de Funespaña a través de Inver Services, en torno al 33%". Esta afirmación choca con varios hechos. La policía francesa asegura que el préstamo estaba garantizado el mismo día "por el aval irrevocable de una cuenta a plazo fijo" de Inver Services. Aunque Rodrigo dice que no podía disponer de ese dinero, un año después el banco daba por reembolsado el crédito.

Rodrigo afirma que con los 140 millones participó en febrero de 1993 en una ampliación de capital en Funespaña, de la que dice que ya poseía un 33% dos meses antes, cuando la empresa privada compró el 49% de la funeraria. Este diario ha cotejado las ampliaciones de capital de Funespaña, y en febrero de ese año sólo hubo una: pasó de 50 a 100 millones. Según esto, Rodrigo habría rebasado él solo con 140 millones el capital total de la firma.