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Reportaje:

Entre 80.000 y 90.000 pesetas por hijo

El comienzo del curso escolar conlleva todos los años un capítulo añadido: los gastos de ropa, libros y otros materiales. Es un aspecto nada desdeñable en el presupuesto familar. Los centros públicos permiten a sus alumnos vestir como quieran y no imponen un uniforme. Algunos privados, especialmente los colegios religiosos y los extranjeros, se caracterizan por exigir a sus alumnos un traje que les diferencia del resto. En ambos casos los gastos son a tener en cuenta. Se acabaron los tiempos en que los uniformes se elaboraban a medida por los sastres designados por los centros. Los libros hace décadas que también dejaron de adquirirse en las librerías elegidas por la dirección del colegio.

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Regreso a las aulas

Actualmente, los grandes almacenes son los grandes suministradores, con precios competitivos que obligan a protestar a los pequeños comerciantes.

La Federación de Consumidores de Euskadi (EKE) ha elaborado un presupuesto medio sobre los gastos que tiene que afrontar una familia que tiene hijos en edad escolar. Y lo ha hecho bajo mínimos, sólo teniendo en cuenta lo imprescindible. La conclusión es que el gasto por hijo oscila entre las 80.000 y 90.000 pesetas.

El uso obligatorio de uniforme escolar supone un desembolso medio de 25.000 pesetas. El equipamiento deportivo, que incluye como mínimo chándal, playeras, ropa de gimnasia y bolsa, cuesta unas 20.000 pesetas. El material escolar, con sus imprescindibles cuadernos, lapiceros y pinturas añade a la factura 10.000 pesetas. Además, hay que sumar los libros de texto y las fichas, otras 25.000 pesetas más. En total, entre 80.000 y 90.000 pesetas por hijo. El gasto puede ser mayor.

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