Del Café Gijón al Manhattan de Caperucita
Carmen Martín Gaite ha sido una escritora prolífica que ha tocado todos los palos y géneros literarios. Desde la novela al teatro pasando por la poesía, la traducción y hasta los guiones televisivos.Su primer cuento Un día de libertad, lo escribió a los 18 años, en 1953. Sólo un año más tarde, gana el presitigioso premio literario del Café Gijón con su novela El balneario.
Tres años más tarde ganó el Premio Nadal con otra novela Entre visillos, en la que la escritura recrea la vida de un grupo de chicas adolescentes de clase media en una ciudad provinciana en los años cincuenta.
En 1959 escribió La hermana pequeña, y en 1974, después de un prolongado silencio literario, dio a la imprenta una de sus obras más alabadas: Retahilas, una novela compleja desde el punto de vista formal ya que se estructura en torno a los dos monólogos encadenados que mantienen una tía y su sobrino.
En 1976 publicó Fragmentos de interior y en 1978 ganó el Premio Nacional de Novela con El cuarto de atrás, donde la protagonista se confiesa ante un entrevistador que se presenta de improviso en su casa en plena noche.
En 1988 saca a la luz otra novela, Desde mi ventana, y dos años después da un giro a su producción publicando Caperucita en Manhattan y La reina de las nieves, dos recreaciones de cuentos populares Caperucita y Blancanieves. En Caperucita en Manhattan, por ejemplo, la protagonista debe llevar comida a su abuela pero en vez de un bosque, la niña debe atravesar Nueva York.
Un año después, en 1991, publica el ensayo Usos amorosos de la posguerra española, y en 1992, la novela Nubosidad variable, con lo que la escritora, que hasta ese momento había recibido unanimemente el aliento de la crítica, recibe el del público. La novela se convierte en el volumen más vendido de la Feria del Libro de Madrid de ese año.
En 1998 termina Irse de casa, novela en la que la autora se impuso escribir acerca "del deseo de la gente de cambiar de casa para cambiar de vida". Martín Gaite se centra en esta obra en una ciudad de provincias, siguiendo el rastro de una triunfadora que regresa a sus orígenes desde Nueva York con ánimo de pasar inadvertida.
En 1999 publicó Cuéntame, un conjunto de ensayos y cuentos escritos entre los años 1953 y 1997.
Además de novelas y ensayos, Martín Gaite tuvo tiempo también para escribir poesía, reunida en el volumen A rachas, y guiones de televisión. Entre estos últimos se cuentan la serie Santa Teresa o Celia.
Definió siempre la tarea de escribir como una labor solitaria en la que estaría inmersa mientras viviera: "Cuando acabo un libro se lo entrego a los demás, pasa a ser suyo. El día que quiera hacer un refrito, tiraré la toalla. Mientras tenga aliento, estaré en activo".
