Dos mujeres mueren a manos de sus compañeros sentientales en Vinaròs y Valencia

Una mujer de 32 años, María José Jacobo Villaescusa, murió ayer apuñalada por su esposo, Justo Sanz Díaz, de 39 años, en la localidad castellonense de Vinaròs. El agresor confesó a la Guardia Civil que había actuado en un arrebato de celos. En Valencia, otra mujer, Soraya Hernández, de 33 años, fue hallada estrangulada anoche. El hombre con el que convivía, contra el que había denuncias por malos tratos, fue detenido.

Mal momento

Los hechos ocurrieron sobre las 6.30 de la mañana cuando Justo Sanz Díaz, natural de La Campana (Sevilla), de 39 años de edad y camionero de profesión, asestó varias puñaladas con un cuchillo de cocina en el cuello a su mujer. María José Jacobo Villaescusa, nacida en Santomera (Murcia) y empleada de una agencia de seguros, llevaba varios años casada con su agresor. La pareja tenía un hijo de 6 años que se encontraba en el domicilio en el momento del crimen.Pocos minutos después del homicidio, la Guardia Civil recibió una llamada telefónica. Los agentes se personaron en la vivienda, un chalé adosado situado en el número 42 de la calle de Asturias, y vieron al individuo que descendía del piso superior de la casa, vestido con un pijama y con las manos ensangrentadas. La mujer se hallaba muerta en el piso de arriba y tendida sobre la cama conyugal con varias heridas de arma blanca. El hombre confesó inmediatamente el crimen y afirmó que había actuado movido por un arrebato.

La pareja atravesaba en los últimos meses un mal momento en su relación. Algunos vecinos aseguran que el matrimonio pasaba por una fuerte crisis y que ya habían vivido una temporada separados. Algunos vecinos sostienen que apenas se les veía ya juntos. No obstante, en ningún momento hubo malos tratos, según varios testimonios. Los vecinos no oyeron nunca peleas, y en los servicios sociales de Vinarós no consta ninguna denuncia al respecto. La primera hipótesis de la investigación apunta a que el móvil del crimen fue el de los celos. Tras la detención, el presunto homicida fue trasladado a las dependencias de la Guardia Civil de Vinarós, donde prestó declaración. Esta mañana está previsto que el detenido pase a disposición judicial y que empiecen las diligencias en el Juzgado de Instrucción número 1 de Vinarós. Tras conocer el suceso, en el lugar de los hechos se presentaron, además de la Guardia Civil, la comisión judicial, el forense y el secretario judicial, quienes realizaron la inspección ocular, certificaron la muerte y ordenaron el levantamiento del cadáver y su traslado al Instituto de Medicina Legal de Castellón para la autopsia.Por otra parte, en Valencia, fue hallado anoche el cuerpo sin vida de Soraya Hernández, de 33 años. La mujer había sido estrangulada y a la hora de cierre de esta edición se realizaba el levantamiento del cadáver. Como sospechoso del crimen fue detenido en el mismo lugar donde se halló a la mujer, en el número 10 de la calle de Juan bautista Muñoz, un ciudadano italiano de 65 años, del que trascendió que su nombre es Dino y que convivía con la fallecida desde hacía dos años. La policía y familiares de la víctima confirmaron que tanto la mujer como otros allegados habían presentado numerosas denuncias contra el detenido por agresiones y malos tratos.