El Insalud cierra durante este verano hasta 2.800 camas hospitalarias

El estudio del Insalud sobre la ocupación de camas hospitalarias en 1999, tras el cierre de entre el 12% y el 28% a lo largo de ese verano, reveló los siguientes datos: "En julio del año pasado quedaron libres, en reserva, sin ocupar, 1.350 camas; en agosto, 1.140, y en septiembre, 1.330". El director regional del Insalud, Albino Navarro, interpreta así estos resultados: "Los datos muestran claramente que se podrían cerrar sin ningún problema entre 1.100 y 1.300 camas más, pero no va a ser así".Para el director regional del Insalud es un dato evidente que durante julio, agosto y parte de septiembre la capital y grandes urbes de la Comunidad dotadas de hospital experimentan un fuerte descenso de población. No obstante, muchos madrileños se quedan en la región, es decir, se produce un movimiento migratorio desde las grandes ciudades hasta los municipios de la sierra, y es allí donde, lógicamente, crece la demanda. Por este motivo, el Insalud ha dispuesto este año un refuerzo asistencial sanitario en esas zonas de afluencia estival.

El plan, que cuenta con una dotación presupuestaria de 37 millones, consiste en reforzar la asistencia sanitaria en 23 zonas básicas de salud (que engloban un total de 60 municipio) de la región durante los meses de julio, agosto y hasta el 15 de septiembre. Para ejecutar el plan, el Insalud ha contratado a 45 médicos de familia y 17 enfemeras. Los centros asistenciales que se reforzarán son los situados en torno a la carretera de Burgos en su confluencia con la sierra norte (los ejes Algete, Soto del Real, La Cabrera y Buitrago); los de la sierra de Guadarrama (Collado Villalba, El Escorial, Guadarrama y Cercedilla); los del corredor del río Alberche (Navalcarnero, San Martín de Valdeiglesias y Cadalso) y, finalmente, los del corredor del Tajuña (Villarejo de Salvanés, Perales y Campo Real). También se reforzará con personal de guardia de fin de semana los centros de Aldea del Fresno y Valdemoro."El sistema debe ser flexible y tiene que adaptarse a las demandas allí donde se produzcan".

Por su parte, el sindicato de enfermería SATSE aseguró ayer que los trabajadores del servicio de Nefrología y Neurología del Hospital Gregorio Marañón, que depende de la Comunidad, han advertido de los posibles "riesgos" que corren los pacientes "por falta de personal" en verano. Ponen como ejemplo que de "los cinco enfermeros de la Unidad de Neurología en el turno de tarde, sólo quedarán dos". El hospital replica que la asistencia "está garantizada" porque el personal y las camas disminuyen en la misma o menor proporción que la de madrileños que abandonan la capital.