_
_
_
_
_

Rajoy acentúa su papel en la sombra

Luis R. Aizpeolea

El nuevo vicepresidente primero del Gobierno y ministro de la Presidencia, Mariano Rajoy, ha acentuado su papel en la sombra en relación con su antecesor, Francisco Álvarez Cascos. Desde que inició su mandato, el pasado 29 de abril, sólo ha ofrecido dos conferencias de prensa y tenido cuatro intervenciones parlamentarias, todas ellas en sustitución de compañeros de Gabinete y, por tanto, de lo más dispares: Gibraltar, Canarias, RTVE, inmigración clandestina...El papel del vicepresidente primero, como sustituto del presidente y sin una cartera precisa, está sujeto a posibilidades variadas, además de al lógico contacto permanente con el presidente.

Aparte de sustituir a José María Aznar durante sus ausencias, como, por ejemplo, la actual, con motivo de su viaje a China y Filipinas, Rajoy ha tenido como tarea preferente en estos meses la de fijar el calendario político del Gobierno según los compromisos electorales del PP y a cuidar las relaciones con los partidos que le respaldan, Coalición Canaria (CC) y CiU, indican en La Moncloa. Así, ha recibido pública pero discretamente a sus líderes. La mayoría absoluta del PP facilita las posibilidades de discreción del vicepresidente.

Más información
El Gobierno dará prioridad tras el verano a las medidas tendentes a lograr el déficit cero

Rajoy preside la comisión de subsecretarios de los miércoles, preparatoria de los Consejos de Ministros de los viernes, cuyo control ejerce directamente, con el consiguiente papel de coordinador entre los ministros en las leyes que afectan a varios departamentos. Se ocupa preferentemente del seguimiento de dos: el de Administraciones Públicas, cuyo titular es Jesús Posada, y el del portavoz, Pío Cabanillas.

En el primer caso, Rajoy ha recibido a numerosos alcaldes y presidentes autonómicos y se ocupa, igual que su antecesor, Álvarez Cascos, de equilibrar el reparto de inversiones entre las comunidades autónomas, informan en La Moncloa.

En cuanto al segundo, la pasada semana, Cabanillas, en su primera comparecencia parlamentaria, reveló otra tarea de Rajoy: no es él, sino el vicepresidente quien controla las relaciones con los medios de comunicación.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Rajoy también ha seguido de cerca y en estrecho contacto con el portavoz parlamentario del PP, Luis de Grandes, las negociaciones para cubrir las vacantes del Defensor del Pueblo, del Consejo de Universidades y de RTVE.

Las tareas de Rajoy son muy similares a las de Álvarez Cascos en su momento de mayor esplendor. Pero todos los consultados marcan una diferencia de estilo. "Al contrario que Cascos, no es obsesivo. Da confianza y deja a la gente trabajar".

Quizás por eso, y es otra diferencia con Cascos, Rajoy mantiene intacto su equipo de Administraciones Públicas y Educación: Jorge Fernández, secretario de Estado; Francisco Villar, jefe de gabinete; Ana Pastor, subsecretaria; Francisco Marhuenda, Belén Bajo y Eugenio López, directores generales, y Tomás González, secretario general técnico.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_