La Bienal de Flamenco apoyará la "innovación y la juventud" con 58 espectáculos y 17 estrenos

La XI Bienal de Flamenco de Sevilla, que se celebrará del 5 de septiembre al 7 de octubre, "apuesta por la contemporaneidad", aseguró ayer su director, Manuel Herrera. La metamorfosis, del bailaor Israel Galván; Medea, dirigida por Pilar Távora, o el espectáculo Dos mundos y una guitarra, con Serranito y la orquesta Arsian Música bajo la batuta de Ignacio Yepes, son algunos de los 17 estrenos con los que el certamen apoyará "proyectos innovadores de creadores jóvenes".En el amplio cartel de este gran escaparate del género, en el que se esperan unos 100.000 espectadores, habrá también un lugar para la fusión con propuestas como la de Esperanza Fernández, Gerardo Núñez y la Nueva York Flamenco Reunión; Inventario de Henry Bengoa, dirigido por Pepa Gamboa y con José Luis Ortiz Nuevo, Isabel Bayón y Rafael Riqueni, o Soul, del bailaor Joaquín Cortes, que se ofrecerá en el Estadio Olímpico.

El mismo espacio, con capacidad para 18.000 personas, se usará para la clausura. Un concierto que los organizadores esperan que sea multitudinario y en el que participarán Enrique Morente y Lagartija Nick, Ketama, Raimundo Amador, Navajita Plateá, El Barrio y Diego Carrasco.

Los amantes del flamenco más clásico podrán disfrutar de propuestas como Esplendor, con Chocolate; Así baila Sevilla, de la compañía de Manuela Carrasco, o los estrenos de los bailaores Eva la Yerbabuena y Antonio El Pipa.

La Bienal de Flamenco, con 58 espectáculos en 10 espacios escénicos y un presupuesto de 249 millones de pesetas, rinde homenaje a la bailaora Matilde Coral. La maestra de la llamada Escuela Sevillana protagonizará el montaje Festival del júbilo, con el que se abrirá el festival el 5 de septiembre en el Real Alcázar. Junto a ella estarán Merche Esmeralda y Milagros Mengíbar, entre otras de sus alumnas.

Nuevos escenarios

"La Bienal no puede ser una mera superposición de espectáculos, sino la muestra de lo que realmente se produce en el flamenco", comentó Herrera, que dirige por segunda vez el ciclo organizado por el Ayuntamiento y en el que colaboran la Junta de Andalucía, la Diputación de Sevilla y el Ministerio de Cultura. El certamen, que en 1998 ofreció 48 representaciones a 48.000 espectadores, ha incorporado nuevos escenarios, como el Estadio Olímpico, el teatro Alameda o la sala Joaquín Turina del Centro Cultural El Monte. Además, se mantienen los trasnoches en seis peñas flamencas de la ciudad.

"Atravesamos un momento crucial, porque la Bienal es el mayor acontecimiento musical que Andalucía puede ofrecerle al mundo, y eso tiene dos lecturas. Por un lado, está el provincianismo que nos lleva a mirarnos el ombligo, y, por otro, está la posibilidad que tiene la comunidad de rentabilizar una industria tan importante como la que genera el flamenco", explicó ayer Manuel Herrera, que para reafirmar los aires contemporáneos del encuentro ha encargado el cartel de la bienal al pintor Luis Gordillo.

Como preámbulo del festival, el Área de Cultura del Ayuntamiento ha programado Bienal va por Barrios, del 19 de julio al 31 de agosto. Son 13 espectáculos en escenarios al aire libre y con entrada gratuita. Actuarán Diego Clavel, Tomás de Perrate, Curro Fernández y Carmen Ledesma, entre otros.