El rival de Fujimori quiere "un compromiso de España" con la democracia peruana
El líder de la oposición a Alberto Fujimori en Perú, Alejandro Toledo, llegó ayer a Madrid, donde hoy, a mediodía, se entrevistará con el presidente del Gobierno, José María Aznar, con el deseo de lograr "un compromiso de España" con la democracia de su país y que su eventual mediación pueda ser "clave" en el proceso para conseguir unas nuevas elecciones "limpias y transparentes". El dirigente del partido Perú Posible no se presentó a finales de mayo a la segunda vuelta de los comicios por considerarlos "fraudulentos".
Alejandro Toledo, que fue recibido en Barajas por un centenar de peruanos partidarios suyos a los gritos de "se siente, se siente, Toledo está presente" y "Toledo, presidente", expresó a su llegada su esperanza de que "la intervención de España pudiera ser clave para conseguir unas elecciones limpias en Perú". Después condenó el nuevo asesinato de ETA -estos hechos ocurren, dijo, "cuando la persuasión fracasa"- y estableció cierta comparación entre los terroristas y Alberto Fujimori: "Al igual que los españoles intentan librarse de una ETA que impone su dictadura, los peruanos intentamos librarnos de la dictadura de Fujimori"El dirigente de Perú Posible -durante su estancia en España, coordinada por el escritor hispano-peruano Mario Vargas Llosa, se reunirá también con el ex líder socialista Felipe González; el futuro defensor del Pueblo, Enrique Múgica, y el presidente de la patronal CEOE, José María Cuevas, y será investido doctor honoris causa por el Colegio de Abogados de Barcelona- se entrevistará hoy, en La Moncloa, por el presidente del Gobierno, José María Aznar. "Tengo", dijo, "buenas referencias de él". "No quiero anticipar nada antes de ver", advirtió, sin embargo, e insistió en que su partido está "embarcado" en "rescatar [en su país] la democracia y el respeto a las instituciones".
Economista, de 54 años, el rival de Fujimori no se presentó el 28 de mayo a la segunda vuelta de las elecciones en las que trataba de desbancarlo por considerarlas "fraudulentas". No en vano terminaron celebrándose sin el aval de los observadores internacionales, ya que la Organización de Estados Americanos los retiró al ser desatendida su recomendación de que se aplazasen a fin de efectuar determinados cambios en el proceso electoral que permitieran considerar válidos sus resultados. Así, Fujimori fue el único protagonista de las mismas y obtuvo el triunfo con el 51,20% de los votos emitidos.
"Ni la victoria de Fujimori ni su Gobierno son legítimos", considera Toledo, para quien la única solución es la convocatoria de una nueva cita con las urnas que, esta vez sí, sea "limpia y transparente". Respecto a cómo debería efectuarse y llevarse a cabo este llamamiento y si aceptaría o no una nueva candidatura de Fujimori, no se pronuncia de momento, informa Efe, pero tampoco quiere cerrar "ninguna puerta". En cualquier caso, sí que reitera que sería precisa "la participación y el aval de los organismos internacionales de observación electoral".
"Fujimori", recuerda Toledo, "ya interrumpió el orden constitucional y democrático en 1992", cuando, tras haber sido elegido en las urnas en 1990, perpetró un autogolpe de Estado con el apoyo de las Fuerzas Armadas. Desde entonces, añade, ha dejado "en la impunidad" una larga lista de supuestos casos de violación de los derechos humanos y "ha secuestrado la independencia del poder judicial".
Durante sus diez años al frente del Ejecutivo, concluye Toledo, Fujimori ha tenido como norma constante "la ruptura de la institucionalidad democrática": "Todos los elementos del Estado están controlados y al servicio de sus intereses particulares".
Toledo, que mañana, martes, viajará a Bruselas para entrevistarse con Javier Solana, representante de política exterior y seguridad de la Unión Europea, ve a España como "el principal inversor en Perú [espera que aún lo sea más] y una puerta de entrada a Europa".
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