Azkuna considera "ilegal" el plan de empleo que la oposición quiere aplicar
El Ayuntamiento de Bilbao celebró ayer el pleno más breve de lo que va de mandato. Fueron poco más de tres horas, en las que la oposición (PP y PSE, con el apoyo de Iniciativa CiudadanaVasca) lograron aprobar un plan de empleo, elaborado por todos los sindicatos, que la alcaldía considera "nulo de pleno derecho" y se niega a aplicar. Los partidos de la oposición insistieron en que el contenido de la moción aprobada es un "documento de voluntades políticas" e instaron a discutirlo más adelante en detalle.
La moción sobre el denominado Plan Estratégico de Generación de Empleo, elaborado por LAB, ELA, CCOO, CSIF y UGT con el apoyo de todos los grupos menos PNV-EA, indica, entre otras cuestiones, que las condiciones de trabajo en las sociedades municipales y las empresas contratadas por el Ayuntamiento de Bilbao deben cumplir todos los apartados del acuerdo. Esto abarca la semana de 35 horas, la posibilidad de tomar un excedencia de 10 años para cuidar a un hijo y un permiso sin sueldo de hasta dos años, entre otros asuntos.La alcaldía llevó al pleno un informe jurídico que señala que "el acuerdo resultará nulo de pleno derecho" en caso de ser aprobado, cosa que ocurrió por 15 votos a favor y 9 en contra. Añade el informe de legalidad que el concejal de Recuersos Humanos no tendrá obligación de aplicar el plan porque contiene "ilegalidades". El dictamen argumenta aue lo establecido en el plan de empleo va más allá de las competencias del pleno e incluso del alcalde.
La oposición protestó porque el alcalde les entregara en la misma sesión el informe e insistieron en su intención de debatir el plan, punto por punto, en la comisión de seguimiento (integrada por los partidos y sindicatos) que se creará. También acusaron a la coalición de gobierno de carecer de disposicón a negociar en los seis meses que ha durado la gestación del plan. El pleno aprobó, en una moción diferente, el acuerdo de los funcionarios locales de Euskadi que incluye la aplicación de las 35 horas.
La expulsión de los concejales de EH del pleno, después de que el alcalde les impidiera leer un texto sobre los presos de ETA y suspendiera dos veces el pleno ante su negativa a callar, hizo que el pleno no debatiera la moción de esta formación en la que se reclamaba a Azkuna que presentase los presupuestos antes del verano. Tampoco se discutieron las mociones de IU porque su única concejal, Julia Madrazo, no acudió por razones personales.
La moción del PSE para sustituir el lema Bakea behar dugu por Democracia y libertad no logró los 15 votos necesarios para ser debatida con urgencia. Los socialistas anunció que la volverán a presentar por vía ordinaria, lo que obliga a discutirla en el próximo pleno.
El pleno también dio luz verde a que el Ayuntamiento obtenga una mayor participación (el 16%) en la sociedad propietaria de los terrenos y el edificio del Guggenheim, a cambio de los mil millones de pesetas que le debe ésta.
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