Un libro recorre en 565 citas la historia de la estupidez humana

La estupidez humana ha dado mucho juego desde el principio del mundo, y siempre ha ido ligada al mal. Ese recorrido por la historia y por los misterios insondables de la imbecilidad humana es el objeto del libro El que no lea este libro es un imbécil (Taurus), del editor y escritor Oliviero Ponte di Pino (Turín, 1957).Como no podía ser de otra manera, esta especie de biografía del imbécil está llena de humoradas; pero no se queda sólo ahí e incluye una exhaustiva documentación. A través de 565 citas de filósofos, científicos, escritores, matemáticos, publicistas, cineastas, Ponte di Pino estimula la ironía y mucho la autocrítica. Ya lo dijo ayer el filósofo Fernando Savater, que acompañó al autor en la presentación del libro. "El estúpido que más cerca se tiene es uno mismo, no tenemos más que observarnos tres veces al día y tenemos un estúpido en funcionamiento".

Claro que unos se aplican más que otros en ese arte que Pío Baroja llamó la pantontería humana. Savater citó las andanadas de Arzalluz, la lectura de los periódicos y una frase del alcalde de Nueva York ("si no fuera por los asesinatos, Nueva York sería una de las ciudades con menos criminalidad del mundo") para deducir que la imbecilidad humana está a la orden del día.

Titular publicitario

Ponte di Pino, colaborador en el periódico Il Manifesto, hace referencia en su libro a Aristóteles, san Mateo, Ludwig Wittgenstein, Georges Bataille, Borges, Baudrillard, Lars von Trier, entre otros muchos, a los que les ha interesado la estupidez como reflexión. Se recogen citas como que "la imbecilidad humana tiene una fuerza extraordinaria"; "los malos a veces descansan; los imbéciles, nunca"; o ésta de Jonathan Swift: "Cuando en el mundo aparece un verdadero genio, se le puede identificar por este signo: todos los necios se conjuran contra él". O aquella cita del poeta Charles Baudelaire, a los que la estupidez les sedujo: "La estupidez es, con frecuencia, un ornato de belleza..., es siempre una conservación de la belleza: retrasa las arrugas".

Para Di Pino, este siglo XX es uno de los más estúpidos de la Historia. A través de las adivinanzas, el autor propone una reflexión: "¿Cómo llamarías, en resumen, a un siglo en el que la humanidad ha cometido tales y tantos crímenes contra sí misma?". Pues eso.

Oliviero di Pino ha elegido el provocativo titular El que no lea este libro es un imbécil (que a algunos responsables de la editorial les costó admitir, según dijo el autor) siguiendo la técnica de la publicidad: "Uno puede hacer una publicidad horrorosa, pero que funciona porque se acuerda siempre de ella".