El tribunal que decidirá si Elián puede pedir asilo interroga a las partes
Tres jueces federales del Tribunal de Apelaciones de Atlanta interrogaron ayer a fondo durante 80 minutos a los abogados de las dos partes enfrentadas en el caso de Elián González: el padre del niño balsero y sus parientes exiliados en Miami. Dos asuntos interesaron particularmente a los magistrados: el debate sobre si Elián, de seis años, es demasiado pequeño para solicitar asilo político en EEUU en contra de los deseos de su padre y la posibilidad de que la voluntad expresada por el padre pueda ser puesta en entredicho por su condición de habitante de "un país totalitario".
Los jueces anunciaron que adoptarán una decisión con rapidez, aunque se reservaron el derecho a que ésta pueda tardar en producirse unas pocas semanas. El Tribunal de Apelaciones de Atlanta tiene que pronunciarse sobre si Elián tiene derecho a pedir asilo político en EEUU aunque su padre, Juan Miguel, insista en que quiere llevárselo a Cuba. Desde que agentes federales lo sacaron por la fuerza de la casa en Miami de sus parientes Lázaro y Marisleysis González, Elián vive con su padre en un lujoso centro de veraneo de Wye Plantation, no lejos de Washington.Las preguntas efectuadas por los magistrados a los abogados de las dos partes desvelaron cuáles son sus preocupaciones. El juez J.L.Edmondson pareció preocupado por el futuro que espera a Elián en Cuba, país que calificó de "Estado totalitario comunista". Edmondson señaló que no es infrecuente que los tribunales de los países democráticos sentencien que los derechos de los padres pueden ser anulados en beneficio de sus hijos. Y citó el ejemplo de los niños cuyos padres se oponen a que reciban tratamiento médico por razones religiosas.
Gregory Craig, que fue abogado de Bill Clinton en el caso Lewinsky y se ocupa ahora de los intereses de Juan Miguel González, afirmó que el padre es sincero cuando expresa su deseo de hacerse cargo de Elián en Cuba, y añadió que no actúa bajo la coerción del Gobierno de Fidel Castro. Desde que llegó a EEUU, Juan Miguel González, señaló Craig, "es libre de expresar abiertamente sus sentimientos y sus opiniones". El padre del niño balsero actuará en beneficio de su hijo "libre de cualquier tipo de manipulación de Miami o coerción de La Habana". Kendall Coffey, abogado de los familiares de Elián en Miami, replicó que si Elián regresa a Cuba, las buenas intenciones de su padre no tendrán la menor importancia. "No hay ningún padre en Cuba que controle lo que le ocurre a su hijo, y no existe ningún poder en EEUU que pueda proteger a este niño si va a Cuba", dijo Coffey. El abogado añadió que Elizabeth Brotons, la madre de Elián, y su padrastro murieron cuando intentaban escapar de Cuba, cuyo régimen los considera "traidores". El juez Charles Wilson preguntó a Coffey si Elián está en condiciones de comprender lo que es una solicitud de asilo. "Estoy seguro de que Elián González es un niño inteligente de 6 años, pero lo cierto es que ni siquiera fue capaz de firmar con su apellido el formulario de solicitud de asilo", dijo Wilson.
Demasiado pequeño
El Servicio de Inmigración y Naturalización (INS), un organismo administrativo gubernamental, y un juez federal de Miami ya han rechazado de plano la petición de asilo firmada con su nombre propio por Elián y tramitada por su tío abuelo Lázaro. El Gobierno de EEUU cree que Elián es demasiado pequeño para enfrentarse a este tipo de decisiones trascendentales y que solo su padre está capacitado para hacerlo.
El trío de magistrados de Atlanta puede ser el último cartucho de los familiares de Miami. Si sentencia que Elián no está en condiciones de solicitar asilo en contra de la voluntad de su padre, Lázaro y Marisleysis tendrán 45 días de plazo para intentar llevar el caso ante los 12 jueces del Tribunal del 11 Circuito. Pero es muy probable que, entretanto, sea levantada la prohibición judicial que impide a Juan Miguel y Elián González abandonar EEUU en dirección a Cuba.
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