Amena adapta sus antenas de telefonía a la futura normativa

Amena es, desde ayer, la primera compañía de telefonía móvil que ha decidido adaptar sus antenas a la futura norma de protección ambiental catalana, antes incluso de que ésta entre en vigor. La norma, impulsada por el Departamento de Medio Ambiente de la Generalitat y el consorcio Localret, obligará a las operadoras a minimizar el impacto ambiental causado por la radiación electromagnética de las antenas, a reducir su impacto visual y a someterse a las ordenanzas municipales que deben regular la futura instalación de este tipo de equipamientos. El acuerdo, plasmado a través de la firma de un "convenio voluntario", es el primero que se establece entre la Administración catalana y una de las grandes operadoras de telefonía móvil. El consejero de Medio Ambiente, Felip Puig, explicó ayer que la firma del convenio resume el interés de la Generalitat por lograr acuerdos que faciliten la actuación de las empresas telefónicas en un marco de "seguridad" en materia de salud humana y ambiental sin tener que forzar su adecuación cuando empiece la aplicación de la norma. Puig subrayó el valor de la firma "voluntaria" del acuerdo y dijo que espera llegar a convenios similares con el resto de operadoras en las próximas semanas.