La Iglesia y la guerra civil
He leído en su periódico que el arzobispo Rouco ha inaugurado el plenario del episcopado con la petición de que la guerra civil no se repita nunca. Es una buena noticia, ya que parece indicar que en la actualidad la Iglesia católica no está dispuesta a apoyar y dar cobertura social a un golpe de Estado, contra un Gobierno democrático y elegido por los ciudadanos no se nos olvide, como el que dio origen a nuestra guerra civil. Pero tampoco es para echar las campanas al vuelo, ya que, seguidamente, ha comentado que "el clero no puede autoinculparse de sostenedor del régimen dictatorial implantado por los vencedores" y con su habitual cinismo pide perdón por "por todas las acciones cometidas por los españoles de un lado y otro de los frentes bélicos", aunque a continuación habla de agilizar los procesos de canonización de sus mártires en dicha contienda. ¿Y la responsabilidad de su Iglesia en ese periodo? Que se dejen de hipocresías y que canonicen ya a su caudillo. Lástima que ahora que parece ser que la Audiencia Nacional se está convirtiendo en el Tribunal Penal Internacional no tenga que declarar como máximo responsable inculpado junto con aquéllos a los que su congregación dio cobertura no sólo durante la guerra civil, sino muchísimas décadas después.-
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