Esperanza Aguirre se compromete a culminar en esta legislatura la reforma del Senado

La presidenta del Senado, Esperanza Aguirre, se comprometió ayer a culminar esta legislatura la reforma de la Cámara alta. Este compromiso y las frases que pronunció en euskera, catalán y gallego para reafirmar el carácter de "nación plural" de España fueron las notas dominantes del discurso con que cerró la sesión constitutiva del Senado. Aguirre recibió 223 votos a favor de los senadores del PP, PSOE, CiU y CC. Sin embargo, votaron en blanco los socialistas catalanes, integrados con Esquerra Republicana e Iniciativa per Catalunya en la Entesa, así como el PNV y Grupo Mixto. En total, 24.

Aguirre, lo mismo que su antecesor en el cargo Juan Ignacio Barrero hace cuatro años, contó con el voto de confianza del PSOE para llevar adelante la reforma del Senado como Cámara territorial de nacionalidades y regiones, cuyo compromiso fue la guinda del discurso con el que cerró la sesión constitutiva de la Cámara alta y que fue seguido desde los palcos por tres presidentes autonómicos: Alberto Ruiz-Gallardón, de Madrid; Eduardo Zaplana, de la Comunidad Valenciana, ambos del PP, y el socialista Juan Carlos Rodríguez Ibarra, de Extremadura.La presidenta no precisó el alcance de la reforma del Senado, pero sí fijó su plazo, esta legislatura, y su orientación, "la mejora de las normas y procedimientos que articulan la representación de las nacionalidades y regiones", así como la apertura de "cauces de representación a los entes locales constitucionalmente reconocidos".

Resaltó esa particularidad del Senado al insistir en su discurso en la calificación de España como "nación plural". Aguirre subrayó el papel genuino de esta Cámara al pronunciar esta parte de su intervención, la más importante, en euskera, catalán y gallego.

En tres idiomas

Su discurso, rubricado con un final en los tres idiomas, contó con el aplauso unánime de la Cámara, aunque tres de sus siete grupos parlamentarios (dos más que en la anterior legislatura) habían votado en blanco su designación. Fueron el PNV, marginado del diálogo con el partido del Gobierno por mantenerse en el Pacto de Estella; el Grupo Mixto, formado por el Bloque Nacionalista Galego; IU y el Partido de Independientes de Lanzarote.

El PNV formará grupo con el préstamo de dos senadores del Grupo Mixto y Coalición Canaria con cuatro del PP.

El voto en blanco de la Entesa Catalana ofreció la nota distintiva de la jornada ya que nueve de sus 11 integrantes pertenecen al Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), federado con el PSOE, cuyos senadores sí votaron a favor de Aguirre.

Esta situación atípica obligó al portavoz de la Entesa, Isidre Molas, a explicar el sentido de su voto. Atribuyó el voto en blanco a su marginación de la Mesa de la Cámara alta cuando CiU dispone del mismo número de miembros, 11, y menos votos y contará con un representante, Jaume Cardona, en dicha mesa, en la cuarta secretaría. El PP contará con cuatro (la presidenta, Esperanza Aguirre; el vicepresidente primero, Alfredo Prada; la secretaria primera, María Eugenia Martín; y el secretario segundo Damián Caneda); y el PSOE, con dos (el vicepresidente segundo, Javier Rojo, y la secretaria tercera, Pilar Novoa).

El peso de la redoblada mayoría absoluta del PP se hizo notar al perder CiU la vicepresidencia primera, que en la legislatura anterior ocupó el hoy presidente del Parlamento catalán, Joan Rigol.

El PP llegó a proponerlo como presidente del Senado, pero Jordi Pujol no aceptó que otro miembro de CiU tuviera un rango superior al suyo.