Madrid es la ciudad europea con menos índice de muertos en menores de 65 años

Madrid es la ciudad europea con el índice de mortalidad más bajo para menores de 65 años, según un estudio realizado por el Proyecto Megapoles, una red europea de salud pública en la que participa el Ayuntamiento de la capital. Según este informe, los índices de mortalidad para este grupo social son de tan sólo 371 muertes por cada 10.000 habitantes, cuando el valor medio de este índice en la Unión Europea es de 477 fallecidos. Para obtener estos datos, el Proyecto Megapoles ha llevado a cabo una comparación de los aspectos sociosanitarios de las 18 ciudades y regiones que integran la red. Se han estudiado 40 indicadores de salud en cada una de ellas.

En Madrid, según los informes de Megapoles, tan sólo se producen 20 muertes por cada 10.000 habitantes, lo que supone 25 fallecidos menos que en Copenhague, la capital europea con el mayor índice de fallecimientos.

También la capital de España presenta óptimos indicadores en cuanto a mortalidad infantil (niños menores de un año). En Madrid mueren 4,2 menores de un año por cada 1.000 nacimientos, lo que la sitúa, junto a las ciudades de Helsinki y Lyón, como la localidad con índices más bajos de mortalidad infantil.

En el otro extremo se encuentran Amsterdam, la región de Lazio y Lisboa, con valores por encima de seis muertes, y Atenas, donde se superan los ocho fallecimientos por cada 1.000 nacimientos.

37% de fumadores

Por otro lado, Madrid presenta algunos indicadores mejorables relacionados con factores de riesgo para la salud de sus ciudadanos. Así, en la capital de España se da el mayor porcentaje de fumadores (un 37% de los madrileños fuman); mientras que un 7,6% de los habitantes de la capital son obesos, lo que supone un valor cercano a la media europea.

Este estudio que difundió ayer el Ayuntamiento de la capital es una de las iniciativas que ha puesto en marcha el Proyecto Megapoles, un programa que centra su actividad en tres áreas de trabajo: jóvenes y familias jóvenes, grupos socialmente desfavorecidos, y envejecimiento en áreas metropolitanas.

El proyecto Megapoles para determinar la salud pública de las ciudades integradas en él está financiado con fondos de la Comisión Europea. En él, desde su creación en 1997, participa el Ayuntamiento de Madrid.

Las 18 grandes ciudades y regiones europeas que lo integran tienen como objetivo intercambiar información, metodologías y experiencias prácticas para crear una estrategia de salud pública común que permita reducir las desigualdades sanitarias, especialmente en determinados grupos de población de estas ciudades. Además de Madrid, en el proyecto participan Londres, Dublín, Amsterdam, Lisboa, Lyón, Viena y Berlín, entre otras grandes ciudades de la Unión Europea.