Las asociaciones agrarias piden a la CE un plan de ayudas para mitigar los daños de la sequía

Demandas en todos los frentes. Las organizaciones agrarias valencianas, a través de sus homólogas nacional y europea, han pedido a la Comisión Europea (CE) que la sequía sea declarada "catástrofe natural" y que habilite un programa de ayudas específico para el sector agrario que mitigue los daños que está provocando la sequía. Los sindicatos agrarios han solicitado también al Gobierno un decreto de sequía, similar al aprobado en 1994, que contemple una serie de subvenciones e incentivos fiscales para los agricultores afectados por el déficit hídrico.

La COPA-COGECA, organización de sindicatos y cooperativas agrarias de la Unión Europea donde están integrados los colectivos agrarios valencianos más representativos, como la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja), la Unió de Llauradors i Ramaders-COAG y Uteco (Unión de Cooperativas Agrarias de Valencia), ha enviado una petición al comisario de Agricultura, Franz Fischler, para que declare la sequía "catástrofe natural" y ponga en marcha, en colaboración con los gobiernos nacionales de la Unión Europea y organizaciones agrarias de los países miembros, un programa de indemnizaciones para los agricultores afectados por la sequía.Esta petición, que se hace extensiva a las regiones afectadas por la sequía de España, Italia y Portugal, pretende un programa similar al plan de ayudas que la CE ha destinado a los países europeos afectados por las inundaciones y tempestades del año pasado, catástrofe que se cobró algunas muertes y causó considerables daños materiales, sobre todo en Francia.

Aunque las organizaciones agrarias no han concretado el tipo de ayudas, ya que demandan un plan global, fuentes de estas asociaciones puntualizan que estas subvenciones podrían destinarse a la mejora de infraestructuras hidráulicas y compensación de rentas agrarias.

Paralelamente, AVA-Asaja ha formulado una petición a nivel nacional al Gobierno para que apruebe un decreto de ayudas para la sequía similar al de 1994. Dicho decreto, según el técnico de AVA Jenaro Aviñó, debería contemplar préstamos con bajos intereses y a largo plazo, exenciones fiscales y de la Seguridad Social, reducción del IRPF y otras subvenciones que contrarresten las pérdidas de los agricultores.

El objetivo de todas estas demandas, según las organizaciones agrarias mayoritarias, es compensar la maltrecha renta agraria de 1999 y lo que va de año. El problema de la sequía, que ya ha provocado daños en los cereales, pastizales, viñedos y almendros, y que en la provincia de Alicante se calcula que que ha generado pérdidas por valor de 6.000 millones de pesetas, se une a una mala campaña citrícola y hortofrutícola, que hace de 1999 uno de los peores años de la década para los agricutores valencianos.

De hecho, según un informe del Ministerio de Agricultura hecho público en febrero, la renta agraria española en 1999 ha bajado el doble que la media europea. El descenso del poder adquisitivo del sector agrario español se cifra en un 4,2%.

Estas pérdidas, según AVA, afectan más a los agricultores valencianos, debido a que durante la presente campaña han tenido muchos sobrecostes, principalmente por el incremento de uso de agua de pozos, lo que supone un aumento de gastos de hasta un 20% más que el uso de aguas superficiales de los pantanos.

Los recortes de un 10% de los caudales aprobados esta semana por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), así como las restricciones previstas también para antes de final de mes por la Confederación Hidrográfica del Segura, obligarán a los agricultores a abrir más pozos de emergencia y a aumentar más todavía la sobreexplotación de los acuíferos valencianos, que ya es bastante acusada en las comarcas del norte de Castellón y del sur de Alicante, con los consiguientes costes ambientales que esto implica.

Promesas electorales

Tanto AVA como la Unió alertan del peligro que corren gran parte de las cosechas si no llueve en menos de 20 días. El secretario general de la Unió de Llauradors, Lucio Monteagudo, ha manifestado que las restricciones de la CHJ "solucionarán el problema sólo un mes, nada más", y recuerda que "la única fórmula posible" para solucionar el déficit hídrico histórico que padece el campo valenciano es "que Aznar cumpla sus promesas electorales" y apruebe esta legislatura el Plan Hidrológico Nacional y el Plan Nacional de Regadíos.