La versión española

Carlos Jean tiene sólo 26 años y ya se habla de él como "el William Orbit español". También Jean tiene el don de dorar con una nueva pátina a artistas, como ha hecho con Miguel Bosé, Fangoria y OBK, y de crear propuestas inéditas, como la de su disco con Najwa Nimri, bajo el nombre de Najwajean. Ayer presentó su primer disco en solitario, Planet Jean, donde se declara admirador de la música disco de los años setenta."Empecé como aficionado, en casa, con un tecladito casero", recuerda. "El mundo discográfico era algo tan lejano como una montaña, pero un día llegó un helicóptero y me puso en la cima".

Así de sencillo. Y así de difícil. "Hay un tipo de sonido que está en mí, pero creo que el problema es que aquí ha habido muy poco cuidado en los discos con el sonido electrónico. Lo que se hace aquí, en general, suena mal. Por eso creo que lo que hay que hacer es discos de música electrónica con mucho presupuesto. Aquí se ha destacado mucho eso de poder hacer música en la habitación, pero si te limitas a eso no puedes competir con lo que se hace fuera", insiste.

Pero este joven corpulento y jovial, hijo de un haitiano y una gallega, piensa que el término de música electrónica está mal usado. "No hay música electrónica, lo que hay es una herramienta que es la electrónica que se usa para grabar todo tipo de música".

A falta de una sólida cultura club en España, como la británica, Carlos Jean piensa que se deben abrir nuevos caminos. "En el Reino Unido no es que haya una cultura club. Es que la cultura es club. Se apuesta por todo, la música es maravillosa para mezclarse. A mí me da igual cualquier género. Yo me siento cercano a todo lo que sea música".

"En España nos hemos decantado mucho por el estilo dance, pero todo el mundo hace lo mismo. No se escucha buen break beat o drum n'bass. El objetivo de mi disco es ése y también el de hallar un lugar de encuentro entre el mundo comercial y el independiente".