El FBI detiene a un jefe de inmigración de EEUU acusado de espiar para Cuba

Uno de los jefes principales del Departamento de Inmigración de Estados Unidos (INS) en la ciudad de Miami fue detenido en la madrugada de ayer acusado de espiar para el Gobierno de Fidel Castro. La detención es la más importante en los casi 40 años de guerra fría entre Cuba y EEUU. Mariano Faget, de 54 años, tenía acceso a información secreta sobre desertores cubanos y fuentes de espionaje que, según el FBI, ha pasado sistemáticamente a La Habana, violando las leyes de seguridad nacional estadounidenses. Faget es la decimoquinta persona en dos años acusada de espiar para Cuba, pero es quien, potencialmente, ha podido causar más daño debido al material altamente secreto que manejaba. Por sus manos han pasado miles de expedientes y solicitudes de asilo político de cubanos a lo largo de sus 34 años como funcionario.

El FBI llevaba un año vigilándolo, pero decidió capturarlo ahora por temor a que se jubilara el próximo mes. El 11 de febrero, los directores del FBI y el INS en Miami le tendieron una trampa. Se reunieron con él en su despacho para pedirle ayuda ante la inminente deserción de un agente de información cubano. Faget ofreció su colaboración mientras las cámaras del FBI rodaban el encuentro, y 10 minutos después de despedir a sus interlocutores llamó desde su teléfono móvil a uno de sus contactos en Nueva York para avisarle. A las cinco de la tarde, ya desde su casa, volvió a llamar al hombre de negocios neoyorquino para darle pelos y señales del desertor.

Faget mordió fácilmente el anzuelo porque el agente desertor era una de sus conexiones con Cuba. Días antes se había visto con él en el hotel Hilton de Miami, cita que también filmó la policía federal. Así culminaba la primera parte de la Operación Azul Falso (nombre simbólico que le ha puesto el FBI para describir a un ciudadano norteamericano traidor), según relataba ayer el agente del FBI Paul Mallett durante una conferencia de prensa en Miami.

Otros espías

En el sumario de cargos presentado ayer en el Tribunal Federal de Miami se detallan varios encuentros entre Faget y funcionarios de la Sección de Intereses de Cuba en Washington y con otros espías de La Habana. La investigación continúa y se esperan más detenciones en las próximas semanas, de acuerdo con el FBI. Faget permanecía ayer en una prisión federal a la espera de juicio. De ser declarado culpable, puede ser sentenciado a 10 años de cárcel, explicó el fiscal federal Tom Scott.

Faget nació en La Habana, emigró a EEUU en 1960 y se nacionalizó como norteamericano el 22 de noviembre de 1963, el mismo día que asesinaron al presidente John F.Kennedy. En una entrevista concedida hace cuatro años a El Nuevo Herald dijo que recordaba a la gente llorar por Kennedy mientras esperaban para obtener la ciudadanía, y comentó: "Me reí porque pensé que era chistoso el ver cuánto queríamos a la gente de Estados Unidos y a su presidente". Su padre fue el director de Represión de las Actividades Comunistas en la época de Fulgencio Batista.

La detención de Faget no tiene conexión con el de otros 14 cubanos acusados en 1998 de pertenecer a la red de espionaje castrista en EEUU. Tres de ellos cumplen condenas y el resto irá a juicio en mayo. Las autoridades del INS aclararon ayer que Faget no ha desempeñado papel alguno en la decisión de negarle asilo político al niño balsero Elián González.