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El uniforme de Carlos VII

El País

El contenido del futuro museo se compondrá de banderas de las fuerzas carlistas, uniformes diversos -el utilizado por Carlos VII durante la tercera Guerra Carlista (1872-1876)-, catalejos de campaña, pistolas -una de ellas perteneciente al general Zumalacárregui-, y otras armas, como un sable del propio Carlos VII, así como abundante documentación original (diarios de operaciones, libros y fotografías, fundamentalmente).Pérez Nievas pronostica que la repercusión pública que tendrá el museo animará a sacar a la luz otros objetos. La inexistencia de espacios adecuados para depositarlos ha hecho que durante generaciones hayan permanecido custodiadas por coleccionistas privados. Algunas piezas pueden alcanzar un valor altísimo, como los cuatro millones de pesetas que un particular pagó días atrás en Madrid por una simple carta del correo carlista fechada en San Sebastián en 1874 y dirigida a los señores Goitia y Cía, de la fábrica de Hierros, en Beasain.

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El carlismo se refugia en un museo
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