Cohen pide a Europa que gaste más en defensa y no divida a la OTAN

William Cohen, secretario de Estado de Defensa de EE UU, pidió ayer a los europeos que gasten más en defensa y que el desarrollo de la Identidad Europea de Seguridad y Defensa (IESD) no divida a la OTAN. A la vez, fue tajante al asegurar que, dado el amplio consenso al respecto en Washington, si se demuestra que funciona, EE UU desplegará un sistema de Defensa Nacional contra Misiles (NMD), lo que preocupa hondamente a Rusia y a los europeos.

La 36ª edición de la Conferencia de Múnich sobre Política de Seguridad, conocida como Verkunde, puso de relieve una paradoja de la actual situación, al menos en Europa. Pues entre las dos prioridades que sobresalen -por una parte, la defensa de los derechos humanos, que según Wolfgang Schauble, presidente de los democristianos alemanes, refuerza la credibilidad de la disuasión militar, y por otra la necesidad aceptada por todos de contar con Rusia para asegurar la seguridad europea- se interpone la realidad de lo que los rusos están haciendo en Chechenia. Pero aunque el fantasma de Chechenia sobrevoló todos los debates, esa espinosa cuestión se esquivó cuidadosamente.Las quejas de EE UU respecto al atraso en los gastos militares de Europa fueron constantes. Lo de Cohen fue un verdadero tirón de orejas a los europeos. También el senador demócrata Lieberman criticó que los europeos no hayan cumplido con los planes respecto a Kosovo, donde la ONU autorizó la presencia de 4.780 policías -esenciales, como se está viendo en los disturbios de estos días- y sólo han llegado 1.970. Asimismo, de los 759 millones de dólares prometidos por la UE de ayuda económica a la zona, según el senador, sólo se han desembolsado 35 millones.

Identidad europea

Los europeos deben gastar mejor en defensa. Pero también tendrán que gastar más. De momento, Alemania los ha reducido. Sin embargo, los europeos se defendieron poniendo por delante en su esfuerzo para estabilizar Europa, para lo que el señor Pesc, Javier Solana, llamó la "reunificación institucional de Europa": la apertura de la UE a 13 candidatos. Y todos se dedicaron a restar temores a EE UU sobre la identidad europea de defensa, pues aún necesitan a una OTAN que les resulta indispensable, y es "la institución de seguridad dominante", según su secretario general, George Robertson.

Respecto a la Defensa Nacional contra Misiles (NMD), Cohen y varios senadores estadounidenses dejaron claro que si funciona, Clinton tomará, en principio en junio, la decisión de desplegarla, incluso si se lleva por delante el Tratado ABM de 1972, que limita los sistemas de defensa de EE UU y Rusia contra los cohetes balísticos. El general Ivashov, del Estado Mayor ruso, alertó contra ello, y puso de manifiesto que EE UU no puede pretender quebrar el Tratado ABM y a la vez que Rusia ratifique el START 2 de reducción de armamento nuclear estratégico. Los europeos, como el ministro alemán de Asuntos Exteriores, el verde Joschka Fisher, llamaron a consensuar cualquier paso con Washington, y a actuar conjuntamente con Washington, por temor a que EE UU ahonde de forma definitiva la superioridad tecnológica en el terreno militar y a provocar una nueva proliferación armamentista. Mas Cohen habló sólo de "consultas".

En cuanto a las lecciones de la guerra de Kosovo, pudo apreciarse una división entre los militares y los políticos. Así, el general Wesley Clark, que llevó la guerra desde la OTAN, criticó el incremento en las acciones militares, pidió más libertad para el planeamiento de las operaciones y bases legales claras para las intervenciones. Pero en este llamamiento a una mayor eficacia militar, por parte política, prevaleció, como señalaron Lieberman y otros, la necesidad de unidad entre los aliados, aunque retarde las decisiones.