'Girl Fight' y 'You can count on me' triunfan en Sundance
Dos óperas primas, Girl Fight, de la novel Karyn Kusama, un drama romántico de una chica boxeadora de Brooklyn, y You can count on me, del veterano guionista Kenneth Lonergan, la historia del reencuentro de dos hermanos alejados por la vida, compartieron el pasado sábado el premio a la mejor película del Festival de Sundance, el certamen más importante de cine independiente de EE UU. Ésta ha sido una de las mejores cosechas del festival, marcado por la fuerte presencia de realizadoras, que han dirigido casi la mitad de los 32 largometrajes a concurso.Los otros dos grandes triunfadores de la ceremonia de entrega, que se celebró el sábado por la noche en la pequeña estación de esquí de Park City, en las montañas de Utah, fueron dos documentales: Long night's journey into day, que sigue cuatro casos de discriminación racial en Suráfrica, y Dak days, que narra las míseras existencias de los vagabundos de Nueva York.
Este festival, principal lanzadera del cine independiente norteamericano, está organizado por el Instituto Sundance, una asociación no lucrativa creada por Robert Redford hace 19 años para ayudar a los nuevos cineastas. El certamen reúne cada año, en un ambiente lejos de las grandes galas de Hollywood, a jóvenes creadores y ejecutivos de los grandes estudios para dar a conocer lo que se cuece fuera del establishment cinematográfico.
Financiar proyectos
Girl Fight atrajo la atención de la crítica desde el inicio del festival, en enero. Es el primer largometraje de la joven norteamericana Kusama, que luchó durante años pidiendo prestado a sus amigos y agotando préstamos bancarios para rodar. El galardón le ha facilitado un contrato de distribución con la productora independiente de Sony, Screen Gems, por tres millones de dólares (500 millones de pesetas). Éste es uno de los propósitos de Sundance: permitir la financiación y distribución de nuevos proyectos. Un ejemplo fue el del año pasado con El proyecto de la bruja Blair. Se presentó en una sesión de madrugada del festival y pasó casi inadvertido. Después fue un éxito de taquilla.
Long nigth's journey into day, de las dos realizadoras surafricanas Frances Reid y Deborah Hoffman, se llevó el galardón de mejor documental, mientras que Dark days acaparaba los premios de la audiencia, de cinematografía y de libertad de expresión. Su director, el joven británico Marc Singer, se pasó cinco años en los túneles del metro de Manhattan filmando a marginados.
En opinión de los críticos, ésta es una de las mejores ediciones de Sundance. Su creciente popularidad había hecho temer que el certamen fuera a convertirse en un nuevo apéndice de Hollywood. El propio Robert Redford ha limitado sus apariciones para no acaparar la atención de los medios. "Creo que el festival muestra que lo que realmente triunfa es el contenido. Espero que hayamos conseguido presentar un auténtico panorama de películas", dijo el actor.
