Textilhogar abre entre el optimismo de la organización por la gran acogida de los visitantes al cambio de fechas

El cambio de fechas de la feria Textilhogar, haciendo coincidir la inauguración en domingo para facilitar la asistencia de los compradores detallistas, parece haber cuajado. Ayer, cuando el consejero de Industra, Fernando Castelló, inauguró el certamen, miles de personas deambulaban ya por los pasillos del recinto ferial, que a la hora de abrir sus puertas, las nueve de la mañana, ya registraba colas de compradores impacientes por aprovechar el domingo. En la primera jornada de Textilhogar, que se alargará hasta pasado mañana miércoles, 7.100 compradores profesionales pasaron por el recinto. Un total de 480 expositores, una cuarta parte extranjeros, muestran en esta 31ª edición del certamen sus últimas colecciones en tapicería, lencería de cama, ropa de baño y mesa, alfombras, o cortinaje. También se han incluido expositores de complementos, como mueble auxiliar, iluminación u objetos decorativos, dentro de la línea de la organización de ofrecer una oferta global en decoración. El consejero de Industria destacó en el transcurso de la inauguración la buena marcha del sector textil tras unos años en los que las crisis económicas de algunos de los clientes tradicionales habían supuesto un retroceso en el desarrollo. Castelló alabó además el "esfuerzo que está haciendo el sector en los últimos años que le permite tener muy bien enfocado el futuro, que pasa por aumentar la calidad, el diseño, la moda, la investigación y la innovación".

En la feria se pueden encontrar las últimas novedades de un sector con expecial implantación en las comarcas centrales de la Comunidad Valenciana. Este año, el diseñador catalán Santiago Nin ha sido, por encargo de la organización, el responsable de estudiar las tendencias de la temporada, al tiempo que ha realizado un ejercicio de diseño de interior con la tela como protagonista en una casa que se puede visitar en el recinto.

Una de las protagonistas de la inauguración de ayer, pese a su ausencia, fue la futura directora general de Feria Valencia, Belén Juste, una ejecutiva vinculada al mundo de la distribución comercial, responsable por ejemplo de la puesta en marcha de la Galería Jorge Juan de Valencia o del Centro Comercial El Saler. Juste, que desempeñaba hasta ahora su labor en la empresa Metrovacesa, será nombrada el miércoles en una reunión del comité. El nombramiento de Juste en sustitución de Rafael Olcina supone una apuesta del presidente de Feria Valencia, Alberto Catalá, por un perfil profesional alejado de los sectores empresariales y políticos.