El Príncipe media en el conflicto entre Honduras y Nicaragua

La breve estancia del Príncipe de Asturias en Guatemala, donde asistió a la toma de posesión del nuevo presidente, Alfonso Portillo, ha dejado importantes efectos políticos en Centroamérica. Don Felipe favoreció un encuentro entre los presidentes de Honduras, Carlos Flores, y de Nicaragua, Arnoldo Alemán, para dialogar sobre el conflicto fronterizo que ha puesto a ambos países al borde del enfrentamiento bélico.Esta es la primera vez que los dos mandatarios se reúnen desde el estallido de la crisis, el pasado mes de diciembre. La disputa territorial ha creado tensiones en la región y amenaza el proceso de integración centroamericana. Los desacuerdos sobre las demarcaciones fronterizas han enturbiado tradicionalmente las relaciones entre los países del istmo, y en ocasiones han derivado en choques armados.

El problema actual se desató el 30 de noviembre pasado, cuando el Parlamento de Honduras ratificó un tratado de límites con Colombia que Nicaragua no acepta, al considerar que le cercena 130.000 kilómetros cuadrados de sus aguas territoriales. Managua respondió con la imposición de un arancel del 35% a los productos hondureños, mientras ambos Ejércitos se movilizaban en la frontera común.

Hasta ahora, los contactos diplomáticos para analizar el conflicto se habían limitado a los cancilleres de ambos países. El viernes, sin embargo, los presidentes Flores y Alemán aceptaron reunirse en Guatemala bajo los auspicios del príncipe de Asturias, que se mostró más que dispuesto a favorecer el acercamiento.

Cuatro horas de retraso

El encuentro, en el que también estuvieron presentes los demás presidentes centroamericanos, se produjo inmediatamente después de la toma de posesión de Alfonso Portillo, en una sala del mismo Teatro Nacional Miguel Ángel Asturias. Para entonces, los mandatarios habían tenido tiempo de sobra de aflojar tensiones: el retraso de cuatro horas de la ceremonia oficial, que mantuvo a los invitados hambrientos, sedientos y desesperados, fue sobrellevado por los dignatarios en una sala especial.

El contenido de las conversaciones no ha trascendido, pero tanto Flores como Alemán expresaron a la salida del encuentro su voluntad de agotar todas las vías legales y diplomáticas para llegar a un acuerdo.

Según fuentes de la Casa Real, la presencia del Príncipe fue determinante para lograr la aproximación de ambos mandatarios. A partir de sus frecuentes viajes a Centroamérica, el heredero de la Corona ha construido una relación cordial y fluida con los presidentes de la región, lo que ha fortalecido su imagen como figura cohesionadora.

La siguiente escala del viaje es Venezuela, donde llegó ayer a mediodía para hacer entrega oficial de la ayuda española a los damnificados en las recientes inundaciones y visitar algunas zonas afectadas.