Castilla y León se compromete a consensuar su política educativa
El Gobierno de Castilla y León firmó un acuerdo el pasado viernes con los representantes de prácticamente toda la comunidad educativa en el que se compromete a someter a consenso la política educativa de los próximos cinco años, así como a poner en marcha una serie de medidas de mejora de la calidad de la educación.La Junta, que no especificó el presupuesto a invertir en las medidas, ha aceptado este pacto, denominado acuerdo para la mejora del sistema educativo, a las puertas de estrenar las competencias educativas no universitarias el próximo 1 de enero.
El primer objetivo al que se ha comprometido el Gobierno autónomo es garantizar la educación gratuita de forma total desde los 3 a los 16 años, es decir, incluido el tramo no obligatorio de 3 a 6 años de educación la infantil. También pretende elaborar un plan de modernización de la infraestructura de los centros, garantizar una amplia oferta pública de títulos profesionales, crear un plan de dotaciones informáticas y de telecomunicaciones que cubra toda la red de centros, con especial atención a las zonas rurales, y reforzar los programas de formación de valores como la igualdad de oportunidades, la tolerancia, la convivencia, la salud y el respeto al medio ambiente.
Un pacto singular
El acuerdo es singular en España, puesto que hasta el momento no se había conseguido un consenso de esta magnitud. El pacto, que únicamente contó con el voto en contra de la CGT, también contempla aspectos muy importantes para la formación de adultos, mejora del sistema de becas y ayudas al estudio y la implantación precoz de idiomas extranjeros. Junto a esto se atenderá la mejora constante de la red pública de enseñanza manteniendo el actual equilibrio y colaboración con la enseñanza privada concertada y garantizar que todos los centros financiados con fondos públicos estén sometidos a las condiciones de control social previstas por la normativa vigente y a los criterios de escolarización establecidos.
El convenio también especifica que las administraciones se deberán comprometer a dotar a las federaciones de padres y de estudiantes de medios para que puedan desarrollar sus actividades.
El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan José Lucas, manifestó que "la comunidad adquiere con esta medida unos compromisos que emanan de la sociedad y que orientarán la acción de Gobierno en los próximos años". Según Lucas, la comunidad necesita jóvenes preparados "que reciban unas enseñanzas técnicas, pero que también se formen en la cultura y las ciencias humanas". Los sindicatos mayoritarios señalaron que la firma del acuerdo no significa dar un cheque en blanco al Gobierno regional en la organización del modelo de enseñanza no universitaria de la comunidad.
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