Los presupuestos del Ivex de 1996 carecían de fondos para afrontar el contrato con Ford

Los presupuestos del Instituto Valenciano de la Exportación (Ivex) sufren un curioso baile entre los años 1996 y 1998. La partida prevista para gastos de aprovisionamiento en las cuentas de empresa para 1996 carece de dotación. Sin embargo, el informe de la Sindicatura de Comptes relativo a ese año destaca que la entidad ha consumido 1.008 millones en gastos de aprovisionamiento en virtud del contrato firmado con Ford para generar derechos de compensación ante la República de Túnez. Sorprendentemente, los presupuestos de 1997 reflejan 500 millones en esa partida en las cuentas de 1996.

El contrato firmado con la empresa Ford para generar derechos de compensación ante la República de Túnez y permitir la exportación de vehículos producidos en Almussafes compromete al Ivex a comprar productos industriales elaborados en el país magrebí para venderlos por el mismo precio a empresas radicadas en la Unión Europea.Las compras efectuadas por el Ivex son pagadas con los fondos previstos en la partida de aprovisionamientos. El instituto compró durante 1996 materiales por valor de 1.008 millones de pesetas a la empresa tunecina Sonotube, propiedad del ciudadano francés Jean Luc Lagier, según el informe de la Sindicatura. Pero el presupuesto de la empresa pública para aprovisionamientos correspondiente al año 1996 no tenía dotación.

Los presupuestos de las empresas públicas que aprueban las Cortes Valencianas reflejan los balances y las cuentas de resultados del año en curso y las previsiones para el año siguiente. Las empresas públicas no admiten modificaciones de crédito, sino que se rigen de acuerdo con las normas previstas para las sociedades privadas.

Balances paralelos

Sin embargo, en los presupuestos correspondientes a 1997, la entidad consigna 800 millones para compra de mercaderías entre los gastos de aprovisionamiento y, en el paralelo balance de cuentas de 1996, anota en el mismo epígrafe una partida de 500 millones que no constaba el año anterior. La operación se repite, a la inversa, un año después. Las cuentas de 1998 omiten la mención a la dotación para compra de mercaderías, que ascendía a 800 millones. El baile de cifras entre 1996 y 1998 suma, en total, 1.300 millones y tiene su correlato de apariciones y desapariciones en las partidas de ventas.

Los informes de la Sindicatura disponibles hasta la fecha, los correspondientes a los ejercicios de 1996 y 1997, cifran los fondos destinados a aprovisionamientos por parte del Ivex en un 1.008 y 399 millones de pesetas. En conjunto 1.407 millones.

Los mismos informes de la auditoría advierten sobre unas deuda acumulada de 368 millones el primer año, que asciende a 533 en 1997. Las sucesivas invitaciones formuladas desde la Sindicatura para que la empresa pública aclarara la cobrabilidad de las deudas o para que preveyera una partida destinada a afrontar posibles fallidos fueron sistemáticamente desestimadas por la entidad, que evitó también mencionar esas cantidades entres las deudas con entidades bancarias.

La alarma de la Sindicatura alcanza al conjunto de las operaciones de compraventa, todas ellas relacionadas con el contrato con Ford. El informe solicita al Ivex, ya en 1996, que aclare sus relaciones con las empresas proveedoras y clientes. El texto reza: "No nos consta que el Ivex haya suscrito contratos que regulen las condiciones de las transacciones a efectuar, tales como el importe de la operación, el precio, la condiciones de pago y entrega, entre otras".

Es decir, la entidad fiscalizadora alerta sobre la ausencia de soporte documental que justifique el baile registrado en los presupuestos del Ivex durante tres años seguidos.