Un anciano confiesa que mató a su esposa con una bombona

Un anciano de 80 años, F.S.P., confesó a la policía de Cádiz que mató a su mujer, A.S.R., de 77, propinándole un golpe mortal en la cabeza con una bombona de butano. Los hechos ocurrieron en la calle Huerta del Obispo de Cádiz a las 2.30 del domingo. La mujer, que presentaba una herida en la frente, no pudo ser asistida por el equipo de Emergencias Sanitarias que acudió al domicilio. El esposo telefoneó a la policía con la intención de entregarse. Aunque la policía no descarta que el autor empleara otro objeto contundente, el golpe, en todo caso, fue mortal según los primeros indicios.El presunto agresor, que es militar jubilado, según los vecinos, fue internado en la unidad de asistencia psiquiátrica del Hospital Universitario de Puerto Real (Cádiz), donde se le ha sometido a un tratamiento con tranquilizantes porque, después del suceso, sufría una alteración nerviosa. A la policía no le consta que F.S.P. estuviera sometido a tratamiento psiquiátrico antes de la muerte de su esposa.

Los investigadores no han podido establecer con certeza cómo ocurrieron los hechos, si se produjeron en el transcurso de una discusión familiar o si la fallecida dormía en su domicilio cuando fue golpeada. Las primeras declaraciones de los vecinos de la víctima a la policía no relevan nada anormal: no se conocen discusiones familiares en el matrimonio ni tan siquiera posibles desavenencias. La primera explicación que maneja la policía científica, y por la que se inclinan inicialmente, es que se trate de un caso de demencia senil. Durante toda la mañana, los agentes permanecieron en la vivienda recopilando información y posibles pistas para aclarar lo sucedido.

El resto de la investigación dependerá de la autorización de los médicos que asisten al presunto autor del crimen para continuar con el interrogatorio, así como de los datos que aporten los hijos del matrimonio, dos de los cuales residen en Sevilla.