El Congreso rechaza erigir un monumento sobre la guerra civil

Por el momento, la única estatua que adorne el puerto de Alicante será la de un surfista que emerge del espejo de agua. La Comisión de Educación y Cultura del Congreso de los Diputados rechazó ayer una propuesta presentada por Nova Esquerra a través del Grupo Mixto, en la que se proponía erigir un monumento que recordara los trágicos momentos de la caída de Alicante, última ciudad que permaneció fiel a la 2ª República, al final de la guerra civil. Los votos del PP y CiU echaron atrás el proyecto, tras un debate en el que no intervinieron ni PNV ni IU.El puerto de Alicante fue el escenario de los últimos momentos de la rendición de la ciudad. Las crónicas hablan de miles de republicanos que esperaban unos barcos con destino al exilio norteafricano que nunca llegaron. La proposición no de ley apostaba por un sobrio monolito conmemorativo en el puerto, junto con una serie de conferencias y exposiciones sobre el fin de la guerra civil en Alicante.

El diputado de NE por Alicante, Manuel Alcaraz, lamentó que el PP "oculte bajo su amplio manto ciertas nostalgias y prefiera una amnesia colectiva antes que comprometerse en gestos concretos que honren a quienes lucharon por la democracia".