_
_
_
_

Portugal acepta una presencia militar china en Macao antes de su devolución

La visita oficial del presidente chino, Jiang Zemin, a Portugal ha solucionado el gran obstáculo que amenazaba la transferencia pacífica a Pekín de Macao, el primer establecimiento europeo en Asia (1557) y el último territorio del imperio colonial portugués. Las diplomacias de ambos países acordaron ayer en Lisboa que un contingente de tropas chinas entre en Macao, antes de su entrega a Pekín el 20 de diciembre, en "misión técnica y no orgánica". El presidente portugués, Jorge Sampaio, confirmó su presencia en la transferencia de poderes.

Durante su primer día de visita a Portugal, el presidente chino elogió la "excelente cooperación" entre los dos países para superar las divergencias en el proceso de transición de Macao, una pequeña península de 22 kilómetros cuadrados, junto con varias islas, y poco más de 450.000 habitantes, pero con una renta per cápita de 17.000 dólares (2,7 millones de pesetas), casi el doble de la portuguesa, gracias a su principal fuente de ingresos: los casinos de juego.En una breve declaración distribuida a los medios de comunicación, Jiang explicó que los dos países comparten "amplios intereses comunes", y subrayó la voluntad china de "consolidar y reforzar" las relaciones "de amistad y cooperación" bilaterales, cuando Lisboa se dispone a presidir la Unión Europea el primer semestre del año 2000 y pretende ampliar sus intercambios comerciales con el gigante asiático.

La declaración unilateral de Pekín sobre el envío de tropas a Macao, antes de la entrega formal del territorio, obstaculizó las negociaciones bilaterales sobre la transición y comprometió la presencia de Jorge Sampaio en la entrega de poderes. No obstante, las divergencias sobre el caso fueron solventadas ayer durante la visita de Jiang a Lisboa, prevista inicialmente para el año 2001 y adelantada ahora para zanjar los previsibles problemas de una transferencia de poderes sin presencia portuguesa.

La Delaración Conjunta Luso-China de 1987 establece que la Región Administrativa Especial de Macao, similar al actual estatuto de Hong Kong, conservará una elevada autonomía legislativa, ejecutiva y judicial, siguiendo el modelo chino de "un país, dos sistemas", pero será regido desde Pekín en las áreas de Defensa y Exteriores.

Otras diferencias

El aumento de la violencia y el crimen organizado por el futuro control de los casinos de juego, concedidos hasta el 2001 al empresario de Hong Kong Stanley Ho, justificó la insistencia china en enviar tropas al territorio, aunque el escollo ha sido superado mediante una solución salomónico-diplomática que no ha solventado otras diferencias. La diplomacia de Lisboa aún tiene pendientes el reconocimiento total de la ciudadanía portuguesa a cerca de 100.000 macaenses, con pasaporte luso pero sin los derechos de la UE, y el futuro de la lengua portuguesa, considerada oficial en un territorio donde no se habla prácticamente ese idioma y que, además, está casi ausente del sistema escolar.

Independientemente de este proceso, Sampaio agradeció a Jiang el apoyo chino al envío de una fuerza multinacional de Naciones Unidas a Timor Oriental, a pesar de que las autoridades de Pekín se opusieron a que la ONU abriera una investigación oficial sobre la violación de los derechos humanos en la ex colonia lusa.

Como ya ocurrió en sus visitas al Reino Unido y a Francia, Amnistía Internacional organizó ayer una concentración de protesta contra la violación de los derechos humanos en China. Durante su visita al Ayuntamiento de Lisboa, los manifestantes mostraron a la delegación china una gran llave de madera que simbolizaba la necesidad de la apertura de las cárceles en su país y la liberación de los presos políticos.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_