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"Expresamos el gran cambio que la gente quiere"

"¡Se siente, se siente, De la Rúa presidente!", han gritado hasta el último minuto de campaña los partidarios de la Alianza, la coalición que aspira el domingo a romper el monopolio peronista de los últimos 10 años en Argentina. Fernando de la Rúa, el candidato a presidente de la oposición, ha recorrido el país de la mano de Graciela Fernández Meijide, candidata a gobernadora de la provincia de Buenos Aires. La Alianza ha tratado de hacer llegar hasta el último rincón una imagen -las manos entrelazadas de un hombre (De la Rúa) y una mujer (Meijide)- y un lema: "Somos más".Mañana, los argentinos ratificarán esta frase si se confirman los pronósticos de las encuestas. Nacido en Córdoba hace 61 años, casado y con tres hijos, abogado, militante del radicalismo desde los 18 años y jefe de gobernación de la ciudad de Buenos Aires desde 1996, Fernando de la Rúa llama a la puerta de la Casa Rosada, el palacio presidencial.

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Esta semana recorría Ituzaingó, Hurlingham y Tres de Febrero, poblaciones de la provincia de Buenos Aires, apurando los últimos días de campaña. En un receso, recibió a EL PAÍS. Habla de carrerilla, sin pausa, como si tuviera aprendido de memoria el mensaje que debe transmitir en cada ocasión. Es probable que así sea. Recuerda que "la Alianza es la única fuerza que presentó un programa a todo el país, un plan de gobierno. Lo hizo el 25 de mayo ante todo el pueblo y lo difundimos en el todo el interior, para que se recuerde bien; bajo el título El gran cambio".

Pregunta. ¿Qué reformas quedan por hacer después de 10 años de transformaciones?

Respuesta. Lo que ha faltado es acordarse de la gente. Ha faltado el programa de desarrollo social. Hubo unos años de crecimiento económico, reflejo del crecimiento mundial, pero la distribución del ingreso fue injusta; la gente quedó al margen y aumentó el desempleo y la pobreza. Esto es lo que hay que cambiar; que la gente participe y encuentre una justicia distributiva; que termine la corrupción y la república se construya sobre valores morales.

P.Si usted es elegido, ¿adoptará medidas de choque?

R.Hace falta confianza para reactivar la economía. Vamos a mostrar una Administración sana, que elimine el gasto superfluo. Este Gobierno deja un déficit elevado. Hay que mejorar la recaudación impositiva y combatir los grandes casos de evasión fiscal.

P.¿En cuánto se va a recortar el gasto público?

R.Hay que reducirlo en unos 4.000 millones de dólares. Es decir, hay que reducir los gastos superfluos en unos mil millones, y mejorar la recaudación.

P.¿Cuáles son esos gastos que hay que eliminar?

R.Esto se está analizando teniendo en cuenta el actual presupuesto, que ya está en el Congreso. Haremos una propuesta integral. La reducción no se hará sobre el gasto social. Tampoco puede incrementarse, pero sí aumentar su eficiencia con los recursos existentes. Mi programa pasa por reducir los sobreprecios y los sobregastos, combatir la corrupción y la evasión. Hay que ir hacia el equilibrio fiscal y presupuestario, de acuerdo a la ley de convertibilidad que fue aprobada unánimemente. Esto permitirá que bajen los tipos de interés para que las empresas puedan desenvolver su actividad. El objetivo es crear trabajo y, para ello, queremos poner en marcha desde el primer momento un programa para las pequeñas y medianas empresas, que significa asistencia, reducción del coste laboral y de los tipos de interés y mejor acceso al crédito y defensa del mercado para que puedan vender. Un programa de construcción, de viviendas, de infraestructuras, que es altamente movilizador del empleo y de la economía. Un programa nacional de desarrollo turístico de acuerdo a las actuales características de los mercados. Y, por último, hay que defender el comercio, la competencia del mercado, aumentar las exportaciones. Buscar nuevos mercados. Ésta es la idea básica.

P.El FMI ha prometido un préstamo de hasta 10.000 millones de dólares al próximo Gobierno argentino siempre y cuando lleve a cabo una serie de reformas que dicho organismo estima imprescindibles. ¿Va a solicitar un paquete del FMI, y, en este caso, por qué monto?

R.Se determinará en su momento cuál es la fórmula más adecuada, si un crédito para el pago de la deuda o un crédito contingente [puente]. El objetivo es no seguir aumentando la deuda, sino bajarla.

P.¿Van a iniciar un estudio sobre las privatizaciones?

R.Sí, claro. Porque hay muchas que han sido renegociadas últimamente. Quiero ver la validez de estas renegociaciones que tienden a elevar las tarifas, a incrementar el coste argentino. Respetaré el principio de legalidad y de seguridad jurídica y, dentro de ese marco, veremos qué han hecho al final.

P.¿No le parece que la falta de un debate entre los dos principales candidatos -porque usted lo rechazó- ha escamoteado al electorado información sobre las distintas alternativas?

R.Los debates son buenos cuando son constructivos y permiten exponer ideas. Pero, cuando se quiere convertirlos en un show como eje de una campaña agresiva y con insultos, no sirven.

P.¿Cómo cree que llega a la gente la imagen de Eduardo Duhalde y Carlos Ruckauf, por una parte, y la de usted y Graciela Fernández Meijide, por otra?

R.Los justicialistas han mostrado un signo de gran debilidad al alentar el corte de boletas . El primer error es creer que se puede decir a la gente cómo debe votar. En segundo lugar, ignoran que en la Alianza constituimos un equipo y expresamos el gran cambio que la gente quiere. Creo que lo hay que hacer es directamente votar por toda la Alianza, y punto.

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