El mayor consumo de drogas de diseño se da en los 'bares de madrugada'

El mayor índice de consumo de drogas entre la juventud se registra en locales de ambiente tecno-pop, según pone de manifiesto una encuesta efectuada conjuntamente en Madrid y en otras seis capitales europeas, cuyos resultados avanzó ayer el director gerente de la Agencia Antidroga, José Cabrera.La encuesta se ha efectuado en distintos periodos de 1998 y 1999 en Madrid, que participa por primera vez, Amsterdam, Berlín, Praga, Roma, Viena y Zürich, ciudades en las que el patrón de consumo en el ambiente tecno-pop se ha demostrado "muy parecido".

Aunque los resultados no son todavía definitivos, más del 80% de los 500 jóvenes encuestados en locales de este tipo -de los 3.500 de todo el estudio-, que tenían una media de edad de 21 años, admitieron consumir derivados del cannabis, y el 41% admitió que consumía cocaína al mismo tiempo que otras sustancias.

Estos datos son muy similares a los de las otras ciudades -casi idénticos en el caso de Berlín-, mientras otros son diferentes, como el mayor consumo que se produce en Madrid de cocaína, en detrimento de las drogas de diseño, y el menor uso de alucinógenos y opiáceos.

Cabrera no supo dar otra explicación a este incremento del consumo de cocaína que la mayor tolerancia social que se ha advertido en los últimos años. En este sentido, Cabrera comentó que "cada vez se está extendiendo más entre la juventud que el drogodependiente sólo es el desgraciado que se inyecta heroína".

Respecto al control del consumo de drogas en locales de ocio, aseguró: "Cada vez estamos más cerca de firmar un convenio con las federaciones que agrupan a las asociaciones de salas de fiestas", a las que garantizó que sólo se les va a pedir "que cumplan la ley", porque "la salud pública tiene que primar sobre los intereses mercantiles", dijo.

Preferencias musicales

Expertos en drogas de la Unión Europea han mostrado su preocupación a los gobiernos respecto a la relación entre el consumo de droga y las formas de diversión durante los fines de semana. En concreto, tal y como se desprende del citado informe, advierten de que el número de consumidores de cocaína, relacionados con los ambientes musicales (after hours, macrodiscotecas y pubes), asciende en toda Europa a siete millones "y va en aumento". "El aumento en el consumo de cocaína es claro y consistente entre las personas que acuden a estos ambientes musicales y se contempla con preocupación cara al siglo XXI", destacó Cabrera.

Con motivo de la publicación del estudio, la Agencia Antidroga ha organizado un encuentro durante el cual, profesionales de las distintas ciudades europeas compararán sus resultados. Las preferencias musicales asociadas al uso de drogas siguen siendo los rítmos electrónicos.