Bruselas acelera los trámites para negociar el acuerdo pesquero con Marruecos
El comisario europeo de Pesca, Franz Fischler, quiere comenzar cuanto antes a negociar un nuevo acuerdo pesquero con Marruecos, dado que el actual expira el próximo 30 de noviembre. Por ello, la aprobación oficial del mandato de apertura de negociaciones se podría producir en el próximo Consejo de Ministros de Pesca comunitario, que se celebra a finales de octubre. En Bruselas no se descarta incluso, que, con el fin de ganar tiempo, se adelante este trámite.Hasta la fecha, solamente se ha producido un intercambio de cartas entre la Comisión Europea y el Ministerio de Exteriores y Cooperación de Marruecos. Rabat no ha demostrado ningún interés en iniciar las negociaciones y sus autoridades insisten en no renovar el acuerdo pesquero en los términos actuales. La renovación de este acuerdo es vital para el sector pesquero español. De los casi 500 barcos que faenan en el caladero marroquí, 415 son españoles.
En el proyecto de presupuestos de la Unión Europea para el año 2000 se ha hecho una reserva de 125 millones de euros (casi 21.000 millones de pesetas) para pagar durante un año los costes del nuevo acuerdo pesquero, cifra que, sin embargo, se presenta a primera vista como insuficiente si se tiene en cuenta que el coste actual es ya de 20.000 millones de pesetas. El del anterior era 13.000 millones de pesetas anuales.
El objetivo de Bruselas es alcanzar un acuerdo satisfactorio con las autoridades de Marruecos, dentro de la filosofía de gestionar y conservar de forma duradera los recursos pesqueros en aquellas aguas, para lo cual propone poner en marcha una mayor cooperación científica. Las autoridades comunitarias se muestran igualmente partidarias de fijar nuevas formas de cooperación en el terreno comercial, tal como ha planteado Rabat en los últimos años. Marruecos pretende una mayor colaboración en el sector pesquero, pero siempre que las pesquerías sean realizadas por empresas propias o sociedades mixtas.
En España, el futuro de las negociaciones se observa con pesimismo. Aún se recuerda que la flota tuvo que parar durante varios meses mientras se negociaba la renovación de los dos últimos acuerdos. Los marineros gallegos ya han anunciado movilizaciones en demanda de negociaciones que impidan la paralización de la flota el 30 de noviembre.
