El PSOE presionará en los Parlamentos regionales para que las prestaciones mínimas suban 2.000 pesetas

Los socialistas han decidido presionar en todos los ámbitos posibles para que la subida de las pensiones más bajas, que se ha convertido en uno de sus caballos de batalla, se logre antes de las próximas elecciones. Tras el compromiso que ayer anunció el presidente del Gobierno, José María Aznar, de que se subirán todas esas prestaciones por encima del IPC, los socialistas han decidido pisar el acelerador en este asunto. Además de defender una proposición no de ley en el Congreso para que se aumenten 2.000 pesetas a todas las pensiones mínimas, tanto las contributivas como las que no lo son, el PSOE ha decidido trasladar esa presión a los Parlamentos autonómicos. Con esta intención, el secretario general y candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, Joaquín Almunia, ha enviado una carta a todos los grupos parlamentarios que tiene el PSOE en las distintas comunidades autónomas para que presenten de inmediato proposiciones no de ley en las que se pida ese aumento.

Los socialistas ya han cuantificado el coste de esa medida, que debería hacerse, sostienen, con cargo a los Presupuestos y no a las cuentas de la Seguridad Social. Según los datos del PSOE, para desarrollar su iniciativa habría que destinar 80.783 millones de pesetas. Se conseguiría con ello una subida de 2.000 pesetas mensuales distribuidas en 14 pagas.

El portavoz del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró ayer que esta iniciativa debe tomarse de manera "inmediata" por el Gobierno a través de un decreto ley para el que contarían con el apoyo de los socialistas. Precisamente, la propuesta de que se haga por decreto es lo que más critican los populares. Rubalcaba cree que no es "coherente" que un Gobierno que ha utilizado con "demasiada frecuencia" este mecanismo legal se muestre ahora contrario a él.

El portavoz del PSOE sostuvo ayer que el gesto que había hecho Aznar por la mañana de anunciar la subida de pensiones se debe a que el presidente del Gobierno "ha tenido que hincar la rodilla" en todo este asunto, que, según Rubalcaba, era una propuesta exclusiva de los socialistas.

"Hay que decirle a todos los pensionistas que hemos ganado la batalla", dijo el portavoz socialista. En las filas del PSOE están convencidos de que el Gobierno ya ha tomado la decisión de subir las pensiones, pero que está tratando de postergarla todo lo que pueda para impulsarla lo más cerca posible de las elecciones, cuando el impacto positivo en los votantes será mayor.