Zaplana se fotografía con dos secuestrados españoles que lograron escapar de la guerrilla colombiana

Eduardo Zaplana tiene el don de la oportunidad. Aunque no siempre sea diplomáticamente correcto. El miércoles, horas después de haber llegado a Bogotá, tuvo la ocasión de celebrar la exitosa fuga del ciudadano español Antonio García Díaz y su hijo Francisco Javier García Triana, quienes habían sido secuestrados por las FARC, el grupo guerrillero más importante de los que operan en Colombia, tres semanas atrás. El presidente de la Generalitat posó junto a los fugados en "un lugar seguro", según fuentes diplomáticas, y compartió con ellos los avatares de su peripecia. Sin embargo, los responsables de la legación diplomática española en Colombia negaron a los periodistas el acceso a Antonio y su hijo invocando razones de seguridad. De hecho, toda la información disponible sobre la aventura del ganadero español, de 62 años, fue facilitada por fuentes de la Generalitat. Miembros de la misión institucional valenciana justificaron el encuentro de Zaplana con los fugados por su calidad de representante del Estado español. Horas antes de posar para la historia, Zaplana se entrevistó con Víctor G. Ricardo, responsable de las negociaciones de paz con la guerrilla impulsadas por el presidente Andrés Pastrana. Zaplana expresó su "apoyo moral" al proceso e insinuó que no ha trasladado a las autoridades colombianas ninguna comunicación oficial del Gobierno español, sino que espera recibir propuestas concretas para que la Generalitat pueda participar en la "inversión social" que requiere Colombia para avanzar sin traumas hacia una paz duradera. Ayer por la mañana, tras una charla informal con el presidente Pastrana, Zaplana y Pilar Mateo, directora general de Cooperación, tuvieron la ocasión de conocer un programa sanitario que los colombianos denominan El tren de la salud o La locomotora del cambio, que pretende ofrecer atención médica a los residentes de pequeñas localidades del valle del río Magdalena, en el que podría implicarse la Generalitat Valenciana.