El Gobierno balear del PP pagaba 15 millones anuales por informes verbales

La anterior Consejería de Hacienda del Gobierno de Baleares, cuando estaba en manos del PP, estableció un contrato anual de prestación de servicios, de 15 millones de pesetas, por una asesoría que sólo se concretó en informes personales de carácter verbal. El informe contenía propuestas e ideas no plasmadas en documento alguno, pese a ceñirse a la compleja temática de las líneas aéreas, el tráfico y la gestión aeroportuaria, según reconoció el interesado a los nuevos responsables del Ejecutivo regional.

Los cargos de la nueva mayoría de izquierdas en el Gobierno de Baleares se quejan de que han asumido una amplia nómina de consejeros externos y de ex dirigentes del PP contratados laboralmente como técnicos, en función de la confianza política que merecían al anterior Gobierno, presidido por Jaume Matas (PP). Además, hay gestores de las empresas públicas regionales que se mantienen con cláusulas de blindaje o cesantía. El Gobierno entrante ha recibido esta herencia y, en general, lagunas y grandes vacíos de documentación.El asesor verbal del anterior Gobierno del PP es José Jaume, vinculado a la firma JKL Vitrac. La remuneración -estipulada en un contrato aún en vigor-, por actos esporádicos de reflexión de los que no hay constancia escrita, supera en casi cuatro millones de pesetas el sueldo del presidente autonómico. José Jaume daba periódicamente la información oral al ex consejero de Hacienda Antonio Ramis. Este último, interventor de carrera, era un cargo de confianza plena del ex presidente Matas, y ejerció como máximo avalador de la pulcritud financiera y presupuestaria en el Gobierno conservador balear.

Desde su estreno el pasado mes de julio, buena parte de los responsables políticos actuales pertenecientes a la alianza PSOE, PSM, IU-Els Verds, han expresado su malestar con sus antecesores porque "no han hallado, casi, papeles, informes ni documentos" de la anterior Administración. "Ha pasado una mudanza como si vineran nuevos inquilinos", significó un consejero actual.

Ex autoridades autonómicas del PP que vieron cercana su salida del poder encomendaron a sus ayudantes más cercanos la retirada o eliminación de los dossieres, expedientes y archivos a los que suponían confidencialidad, ajenos a los trámites administrativos reglados. Después de 16 años de permanencia en el Gobierno, la operación limpieza, previa al abandono, fue muy prolija. En la Presidencia balear, las máquinas de trinchar documentos trabajaron varios días y se llenaron decenas de bolsas comunitarias de basuras, como han explicado funcionarios que presenciaron estas labores.

Joan Mesquida, consejero de Hacienda, indaga el estado financiero de todas las consejerías y explora la complicada malla de empresa públicas, participadas y fundaciones que extendió el PP.

Mesquida y Antoni Ferrer, responsable de Transportes, ambos del PSOE, citaron al asesor verbal de JKL Vitrac y éste reveló las condiciones de su función.