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El aumento de los viajes a países exóticos hace subir un 26% las consultas sanitarias

Para viajar a buena parte del mundo, además de pasaporte y dinero, es indispensable informarse para evitar el contagio de enfermedades como el paludismo, la fiebre amarilla o la muy frecuente diarrea del viajero. Cada vez se viaja más. Y las delegaciones del Ministerio de Sanidad en Euskadi lo han notado. La cantidad de personas atendidas antes de viajar a países exóticos se ha incrementado en un 26% respecto al mismo periodo de 1998. Los médicos recomiendan acudir a los centros de sanidad exterior al menos un mes antes de partir.

Los centros de sanidad exterior se crearon para prevenir y vigilar las enfermedades transmisibles. En el País Vasco existen tres: en Bilbao, San Sebastián y Vitoria. Todos ellos han notado en los últimos años una mayor afluencia de viajeros. Si antaño la mayoría de los pacientes eran misioneros y marinos, hoy llegan a los consultorios multitud de cooperantes, trabajadores trasladados a países exóticos y sobte todo turistas, incluidas parejas de viaje de novios. En la primera mitad de este año han pasado por los centros 3.308 personas frente a las 2.625 de 1998, según datos del Ministerio de Sanidad y Consumo. Una cifra similar se informó por teléfono. Las recomendaciones son personalizadas y dependen del destino y el tipo de viaje previsto. Entre las enfermedades que se puede llegar a contraer en esos lugares, "muy pocas son vacunables", explica la médico del centro de sanidad exterior en San Sebastián, Ana Vilasau. Se insiste en la necesidad de seguir a rajatabla los consejos higiénicos generales como beber agua embotellada o tratada, evitar la comida de puestos callejeros y untarse de antimosquitos en zonas selváticas. Una de las vacunables -de hecho es obligatorio hacerlo- es la fiebre amarilla, que transmite un mosquito que sólo existe en Suramérica y África. Casi 1.500 personas se pusieron esta vacuna en Euskadi entre enero y junio pasados. El paludismo, también denominado malaria, el una de las enfermedades para las que aún no hay vacuna. África, el sureste asiático, centro y suramérica, fundamentalmente en las cuencas amazónicas, son los lugares donde se puede coger. La prevención contra la malaria incluye un tratamiento con pastillas, además de los tradicionales mosquiteros y lociones repelentes. Entre mayo y septiembre es cuando mayor ajetreo hay en los centros de sanidad exterior, para recibir tratamientos y vacunas, que dejaron de estar subvencionados hace dos años. Como los tipos de viajes, el mapa mundial de enfermedades se transforma con el tiempo. Y es que hace sólo dos décadas, por ejemplo, no existía el sida ni el turismo sexual masivo. La doctora Vilasau explica que la Organización Mundial de la Salud (OMS) prepara un nuevo reglamento internacional sobre prevención, que concluirá hacia el 2008. Vilasau destaca que los viajeros se van acostumbrando a pasar por consulta con suficiente antelación. Es imprescindible, porque la mayoría de los tratamientos y vacunas no son de efecto inmediato. Recomienda a quien vaya a viajar a un país exótico que se informe al menos con un mes de antelación a la partida.

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