2.000 evacuados pasaron la noche en el polideportivo municipal de San Lorenzo

Unas 2.000 casas, un cámping ocupado por 4.000 personas y el hospital de San Lorenzo de El Escorial quedaron anoche vacíos al aproximarse uno de los frentes del fuego a la zona urbana de San Lorenzo de El Escorial. Las llamas, que se encaminaban hacia el Valle de los Caídos, cambiaron de dirección. Entonces amenazaron a unas 10.000 personas, que tuvieron que ser desalojadas de sus lugares de residencia, según los bomberos de la Comunidad. El polideportivo de la localidad se convirtió en albergue improvisado para los afectados. Allí pasaron la noche unas 2.000 personas.

Sobre las 21.30, los 46 enfermos del hospital de El Escorial fueron evacuados en 30 ambulancias de Cruz Roja, del 061 y entidades privadas. La mayoría ingresó en el hospital de Guadarrama, aunque a la clínica Puerta de Hierro se llevaron los pacientes en peor estado.Carmen, una mujer de 68 años aquejada de problemas respiratorios, salió del hospital en una silla de ruedas. Estaba muy asustada: "¿Dónde me llevan? Tengo miedo, sé que me voy a morir", repetía. Mientras, pedía a una enfermera que avisaran a sus hijos. La evacuación del centro sanitario duró una hora. Sólo quedaron en el recinto los médicos y el personal sanitario. Emilio, uno de los enfermeros, indicó que entre los pacientes había miedo: "Al ver que les llevábamos a otro sitio con el fuego tan cerca, han pensado que sus vidas corrían peligro y algún anciano ha pedido la extremaunción".

El desalojo del cámping, casi simultáneo al del hospital, se hizo con autobuses, ambulancias y todoterrenos de Cruz Roja. Había que trasladar a las 4.000 personas que ocupaban la instalación, según los bomberos. Unos 2.000 campistas fueron alojados en el polideportivo cubierto de San Lorenzo de El Escorial, que anoche quedó convertido en un gran albergue. El resto de los acampados optó por abandonar la localidad. La Cruz Roja llevó un millar de mantas al recinto, y Protección Civil, 1.000 colchones. Carmen, una mujer que pasaba la semana con sus dos hijos en el cámping, estaba en la puerta del polideportivo a la espera de su marido. "No hemos tenido mucho miedo, porque el fuego no se ha aproximado como para pensar que podíamos quemarnos", señaló.

A las 21.30 comenzó también la huida de los vecinos de las urbanizaciones La Pizarra y FelipeII, muy próximas al hospital. Más de 3.500 personas salieron de sus casas de forma ordenada y sin prisas mientras un frente del fuego avanzaba peligrosamente hasta esta zona. Las llamas sólo llegaron a alcanzar el seto de un chalé. Andrés, dueño de un chalé en esa zona, estaba aterrado: "Jamás pensábamos que el fuego podía estar tan cerca de nosotros. Afortunadamente, los bomberos han trabajado bien y nuestras casas no han corrido peligro".

A las 0.30 de hoy comenzó el desalojo de una tercera urbanización de San Lorenzo, Monte Escorial. Allí, Cruz Roja y bomberos evacuaron 40 chalés y 30 bloques con 30 viviendas cada uno.

A la una de esta madrugada, el alcalde de San Lorenzo, José Luis Fernández Quejo, aseguraba que la situación era aún delicada: "El fuego no está controlado, ni mucho menos. Nuestro mayor temor es que pueda avanzar de nuevo hacia el pueblo".