Una veintena de países envía a 1.300 expertos en rescate, perros y ayuda humanitaria

En los escombros de la región devastada por el terremoto que sacudió el martes a Turquía se hablan idiomas diferentes, los de los 1.300 expertos en rescate llegados desde una veintena países para ayudar a buscar supervivientes bajo los edificios desplomados. La llamada de solidaridad ha sido respondida de inmediato, incluso por países como Grecia, que mantiene tensas relaciones con el Estado turco. La Unión Europea aprobó ayer una partida de urgencia de 332.000 millones de pesetas, y los primeros aviones con ayuda humanitaria de emergencia ya han salido hacia Estambul.

Los primeros grupos de rescate, provistos de perros y equipos mecánicos, llegaron el mismo martes y ayer desde España, Alemania, Suiza, Austria, Rusia, Azerbaiyán, Bélgica, EEUU, Reino Unido Grecia, Israel, Suiza, Bulgaria, República Checa y Japón. Francia e Italia esperaban enviar bomberos y ayuda anoche o durante el día de hoy. Otros muchos, como Irlanda, aprobaron partidas económicas para ayudar a los damnificados. El ministro turco de Asuntos Exteriores, Ismail Cem, dio las gracias ayer a los países que han respondido inmediatamente a la crisis. "Damos las gracias a quienes comparten nuestro dolor". Y es que la reacción ha llegado incluso desde Grecia, histórico rival de Turquía, que envió dos aviones con ayuda y dos equipos de rescate. "En este tipo de situaciones no hay lugar para otro tipo de razones", dijo ayer el portavoz del Gobierno griego, Dimitris Reppas.En España, la reacción también fue rápida. Los primeros en llegar a la zona fueron los miembros de la Unidad Canina del Centro de Coordinación de Emergencias de la Junta de Andalucía en Huelva. Ayer, los siete expertos y los dos perros de la unidad ya rescataron a dos personas con vida, aunque una murió luego. Ayer salieron hacia Estambul unos 56 bomberos y una decena de perros desde Oviedo, Barcelona, Martorell y Getafe con equipo de rescate completo, según confirmó el ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes. Las ONG españolas también se han movilizado. Cruz Roja y Cáritas envían hoy una primera carga de emergencia, y Médicos Sin Fronteras está instalando tiendas dispensario en Izmit y Adapasar, en la zona más afectada, con equipos de diálisis, ya que los aplastamientos generan graves problemas renales.