Salvador Távora abrirá la 39ª edición del Festival del Cante de las Minas

El Festival Nacional del Cante de las Minas llega a su 39ª edición en olor de multitudes. Un festival que no para de crecer, este año suma un día más a su programación, con lo que la misma se extenderá desde hoy hasta el 14 de agosto. Columna vertebral del festival son los concursos: el de Cante, origen del mismo, se ha celebrado en todas las ediciones, y ofrece como primer premio al mejor Cante por mineras el gran trofeo Lámpara Minera y 750.000 pesetas; el de Toque se celebra desde 1980, y el de Baile desde 1993. En total, se distribuirán alrededor de 5.250.000 pesetas en premios, más diversos trofeos. El festival tendrá como invitado de honor este año al cantaor Antonio Fernández Díaz, Fosforito, a quien se rendirán distintos homenajes.Todo está dispuesto para que esta noche Salvador Távora, autor de numerosas obras de teatro y también director de la compañía La Cuadra -que sigue llevando por todo el mundo su versión de Carmen-, pronuncie el pregón inaugural, que es uno de los actos a que la organización da mayor solemnidad.

Mañana se inician las galas, con el Ballet Nacional de España que dirige Aida Gómez. Seguirán los cantaores Pele y Miguel Poveda y la bailaora Sara Baras (domingo, día 8); Vicente Amigo y José Mercé (lunes, día 9); José Menese y Duquende, cante; Niño de Pura y Manolo Franco, toque; y José Joaquín, bailaor invitado (martes, día 10); Carlos Piñana, toque; y Cristina Hoyos, baile (miércoles, día 11).

Los dos días siguientes, jueves y viernes, se dedicarán a las semifinales de los distintos concursos, actuando todos aquellos concursantes que hayan superado las pruebas de selección previas, y el sábado día 14, por fin, prueba final, con decisión de los triunfadores por los distintos jurados y entrega de los premios correspondientes.

Todos estos conciertos y espectáculos tendrán lugar en la sede principal del festival, el emblemático edificio del Antiguo Mercado Público. Este año el cartel anunciador del acontecimiento, siguiendo una tendencia acreditada en los últimos tiempos, es obra de un notable pintor contemporáneo, Miquel Barceló.

Paralelamente a los conciertos y concursos, están programadas gran número de actividades de carácter cultural, así como el lanzamiento de un par de discos y alguna publicación. Y como en 1998, habrá también madrugadas flamencas, es decir que varios locales de La Unión estarán abiertos a reuniones y tertulias para quienes quieran seguir en un ambiente flamenco tomando una copa y cambiando impresiones, e incluso oyendo algún cante o toque de tono más informal. Como lo que no falta es gente joven con ganas de marcha, estos encuentros se suelen prolongar, a veces, hasta las claras del día. El festival, pues, propicia que durante estos días de cada mes de agosto La Unión se convierta en uno de los lugares de más intensa actividad flamenca, ya que la afluencia de público es más importante en cada una de sus ediciones, teniendo asegurada prácticamente la plena ocupación de los aforos. Un público en el que no falta gran número de extranjeros, como es de rigor.