_
_
_
_
_
verano 99

Los exportadores onubenses de marisco ofertan a los turistas 5.500 kilos de gambas en Punta Umbría

Punta Umbría tiene un producto riquísimo en sus mares: la gamba. La IV Muestra Nacional de la Gamba y el Marisco de la costa de Huelva, que se clausura mañana, es una tentación para el paladar: en cuatro días de degustación está previsto que se consuman en esa localidad costera 5.500 kilos de gambas en los tenderetes ubicados en la plaza de Pérez Pastor. Una delicia que además está amenizada cada noche con los sones marchosos de dos grupos de música. Y encima baratas: 300 pesetas el plato. "La gamba onubense y el jamón de pata negra son los estandartes de los alimentos españoles. En cualquier banquete que se precie, siempre se sirven", comentó ayer eufórico Pepe Morales, director de la Oficina de Turismo de Punta Umbría. Para que la degustación sea completa, entre el pasado jueves y mañana domingo también se servirán 3.000 kilos de chirla y 1.000 de cigalas. Los organizadores de la muestra, la Asociación de Exportadores de Mariscos y Pescado de Huelva, están contentos: en el primer día, el jueves, se sirvieron 8.716 platos de gambas. El objetivo del Ayuntamiento de Punta Umbría, colaborador de la muestra, reside en atraer hacia la localidad el mayor número posible de turistas, aunque haya que recurrir al reclamo del estómago. El año pasado llegaron a esta feria autobuses fletados desde Sevilla y Córdoba, según el concejal delegado de Turismo, el socialista Javier Barrero. "Nosotros pretendemos crear una imagen, una marca que se venda a partir de un turismo cultural y gastronómico. Tenemos la suerte de tener en Punta Umbría, y en toda la costa de la provincia, algunos productos únicos, como la gamba, y hemos de ponerlos en valor. Punta Umbría tiene playa, sol y medio ambiente. Pero además, tiene gambas deliciosas", indicó Javier Barrero. Punta Umbría va a más. En los meses de verano alcanza una población de 100.000 habitantes. En invierno tiene 12.000 vecinos. Esa cifra es hoy un 10% superior a la de 1997. "Durante todos los días del verano hay aquí alguna actividad: exposiciones, música, lecturas... Éste es un pueblo muy vivo", concluyó Javier Barrero.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_