Rusia tacha de "provocación" el bloqueo aliado al envío de sus tropas

Moscú mostró ayer su sorpresa por la decisión de EEUU de obstaculizar el envío de soldados rusos a Kosovo y pedir a Bulgaria, Hungría y Rumania que no abran su espacio aéreo a los aviones del Kremlin. A pesar de que los rusos calificaron de "provocadora" la decisión estadounidense, esperan que los aviones con 100 militares que estaban preparados para despegar ayer puedan hacerlo hoy. Las autoridades rusas han advertido a Hungría del peligro que corren sus relaciones bilaterales con Moscú.

Una delegación de la OTAN llegó ayer a Moscú para discutir los detalles de la operación de paz en Kosovo. El Ministerio de Exteriores ruso dijo ayer que la negativa por parte de Bulgaria, Hungría y Rumania de permitir a los aviones rusos, que debían llevar a un grupo de soldados a Kosovo, sobrevolar su espacio aéreo fue "una sorpresa". Estos países decidieron negar el corredor aéreo a los aparatos rusos a petición de la OTAN, concretamente de EEUU, que alega que todavía no se han aclarado todos los "detalles técnicos" sobre el despliegue ruso en Kosovo. Pero el Ministerio de Defensa ruso considera que esta explicación es absurda: "Todos los detalles del emplazamiento de los militares rusos en Kosovo fueron fijados durante las conversaciones de los ministros de Defensa y Exteriores en Helsinki ", aseguró un portavoz. Más aún, los últimos detalles fueron corregidos durante las negociaciones que durante la semana mantuvo en Bruselas el vicealmirante Valentín Kuznetsov. "Para los militares rusos la situación estaba tan clara que el mando de las tropas paracaidistas ni siquiera estudió el problema de la posible pernocta en [el aeropuerto de] Ivánovo de los soldados que llegaron desde su base permanente", agregó el portavoz de Defensa.

La Casa Blanca no ha confirmado si la salida de Rusia, el pasado jueves, de un asesor militar de su Embajada, tiene que ver con esta situación.

Cien soldados rusos deberían haber volado anteayer a Pristina desde un aeropuerto a unos 300 kilómetros al norte de Moscú. Además de los 100 soldados, los aviones debían llevar 10 blindados y cerca de 30 toneladas de diversas cargas. Está previsto que hoy y mañana salgan otros cuatro aviones desde los aeródromos de Pskov y Riazán con cargamentos similares. Mientras tanto, cuatro buques de Infantería de Marina, al mando del contralmirante Vladímir Vasiukov, dejaron anteayer el puerto de Sebastopol con destino al puerto griego de Salónica. Los buques llevan a bordo soldados y blindados destinados a los Balcanes. En Grecia, desembarcarán y seguirán por tierra a Kosovo.

Moscú está particularmente molesto con Hungría por la negativa a permitir que sus aviones sobrevuelen su espacio aéreo. Un alto funcionario diplomático ruso, que hizo declaraciones a la agencia Interfax a condición de conservar el anonimato, dijo que la decisión magiar indudablemente se reflejará negativamente en el desarrollo de las relaciones bilaterales. El anónimo diplomático señaló que ésta no es la primera vez que Hungría trata de obstaculizar la actividad de Rusia en los Balcanes.

Este nuevo incidente amenaza con hacer aún más tensas las relaciones entre Washington y Moscú, que desde marzo, cuando comenzaron los bombardeos de la OTAN contra Yugoslavia, han empeorado considerablemente. Las tensiones no se terminaron con el fin de la guerra. El Kremlin dejó estupefacto a Occidente cuando, durante las recientes maniobras militares, bombarderos estratégicos rusos ensayaron el lanzamiento de misiles nucleares contra Europa y EEUU.