Los vigilantes de los museos temen la privatización de sus puestos

Los sindicatos CSI-CSIF (Confederación de Sindicatos Independientes), UGT y CC OO del Ministerio de Educación y Cultura convocaron ayer una asamblea en el Museo del Prado, en Madrid, a la que acudieron unos 200 trabajadores, ante el temor de los vigilantes de los museos españoles de que sus puestos de trabajo sean privatizados, señaló el secretario provincial de CCOO de Cultura, José Antonio González Vargas. Según este representante, el detonante fue un informe solicitado por el equipo de la ministra Aguirre "con la intención de privatizar el servicio de vigilancia de todos los museos españoles, mediante bajas laborales y excedencias, y de hacerlo paulatinamente para que no tenga un coste político". Vargas añadió que se están sustituyendo vigilantes de los museos por empresas de seguridad privadas en el Museo Reina Sofía, Sorolla y Serralbo de Madrid; El Greco, de Toledo; el Museo Romano, de Mérida, y el de Cerámica, de Valencia. El representante de CSI-CSIF, Carlos García Bosque, dijo que, antes de aplicar la privatización, "Cultura negociará con los trabajadores a principios de julio. El informe sólo afectaría a los vigilantes de noche y operadores de consola". Este periódico intentó recabar la opinión de Cultura, pero fue remitido al Museo del Prado y en este museo no se obtuvo respuesta.