Los seis kilómetros de la discordia

Los alcaldes de los municipios navarros de Lesaka, Bera, Arantza, Etxalar e Igantzi, agrupados en la comarca de Bortziriak (Cinco Villas) han solicitado a los gobiernos de Navarra y Guipúzcoa que se sienten a negociar de una vez por todas el arreglo de la carretera N-121-A entre Endarlaza y Behobia, un tramo de seis kilómetros cuya propiedad ostenta Navarra, pero que discurre íntegramente por territorio guipuzcoano. Y es que los vecinos de Bortziriak están "cabreados" y hartos de sufrir las malas condiciones de una carretera que esconde numerosos puntos negros y soporta una intensidad de tráfico de entre 7.000 y 8.000 vehículos diarios, según apunta el alcalde de Lesaka y portavoz de los máximos representantes de Cinco Villas, José Luis Etxegarai, del Partido Nacionalista Vasco. Etxegarai explica que un 80% del tráfico es pesado, de manera que entre Lesaka e Irún se forman unas "colas impresionantes", porque "suelen circular dos o tres camiones juntos y es imposible adelantar". Para colmo, según el alcalde de Lesaka, el único puente de un sólo carril que existe en una carretera nacional en toda Europa es el de Endarlaza, un puente por el que no pueden pasar dos camiones a la vez debido a su estrechez. "Es impresentable", sentencia Etxegarai. Por si esto fuera poco, los cortes en la carretera por deslizamientos de tierra y rocas son bastante frecuentes, lo que obliga a los conductores a realizar un largo desvío por carreteras locales del País Vasco-francés. Numerosos accidentes Ante este panorama, agravado por numerosos y graves accidentes, los alcaldes de Bortziriak han instado al consejero de Obras Públicas de Navarra, José Ignacio Palacios, y al diputado de Transportes y Carreteras de Guipúzcoa, Antton Jaime, a que reanuden sus conversaciones, en la actualidad "paradas del todo", asegura Etxegarai. "Corremos un alto riesgo y ellos desprecian nuestra seguridad, no tienen interés en solucionar este problema", insiste. Los alcaldes de Cinco Villas, que a excepción de Etxegarai, militante del PNV, fueron elegidos en candidaturas independientes de orientación nacionalista, tienen su propia teoría para explicar esta falta de comunicación entre las autoridades navarras y guipuzcoanas. En su opinión, responde a una política antieuskaldun" por parte del Ejecutivo navarro, tendente a "aislar" Navarra de Guipúzcoa. "El Gobierno de Navarra ha apostado por la autopista del Pirineo y a nosotros nos tiene abandonados, a pesar de que somos la segunda zona industrial de la comunidad foral, tras Pamplona, con empresas como Aceralia", sostiene al respecto Etxegarai. De hecho, las quejas de los alcaldes de Bortziriak se extienden tanto al tramo Endarlaza-Behobia como al resto de la N-121-A hasta el cruce de Oronoz-Mugaire. Mientras tanto, el diputado de Carreteras de Guipúzcoa,Antton Jaime, coincide con Etxegarai en que las conversaciones están "paralizadas", para explicar a continuación que, en marzo de 1998, el Gobierno navarro, de acuerdo con Guipúzcoa, adjudicó a una consultoría la elaboración de un estudio sobre las obras que convendría realizar en el tramo Endarlaza-Behobia, ya que ambos ejecutivos discrepaban respecto al tipo de arreglo que había que hacer y el dinero a gastar. La consejería navarra de Transportes y Obras Públicas planteaba la construcción de un tramo en autovía, con cuatro carriles, y otro de tres carriles; una obra cuyo coste ascendería a unos 3.600 millones de pesetas (21,5 millones de euros). Sin embargo, y teniendo en cuenta el gran desembolso que supuso la autovía de Navarra (A-15), el Departamento guipuzcoano de Transportes y Carreteras apostaba por aportar alrededor de 1.000 millones de pesetas, una cantidad que se corresponde con lo que suele dedicar a viales similares a la N-121-A. Estudio terminado El caso es que, según Jaime, el estudio está terminado desde el pasado mes de octubre. "Sin embargo, el Gobierno de Navarra no nos ha entregado el documento definitivo, por lo que no podemos iniciar las conversaciones políticas", apunta el diputado guipuzcoano de Transportes y Carreteras, quien. De todas formas, Jaime cree que el periodo electoral en el que nos encontramos "no es el mejor momento para iniciar negociaciones". En estas negociaciones se discutirá la titularidad de la carretera, porque la Diputación de Guipúzcoa siempre ha mantenido que entrará a financiar el 50% del ensanchamiento del vial que discurre entre Endarlaza y Behobia, si Navarra le otorga a cambio la propiedad de sus seis kilómetros. Una opción que el presidente de Navarra, Miguel Sanz, no ve con buenos ojos. "En el caso de obtener la titularidad, [Guipúzcoa] tendría que pagar el 100% de las obras", ha manifestado en alguna ocasión.