_
_
_
_

El músico Markevitch colaboró con las Brigadas Rojas, según la policía

El secuestro y posterior asesinato a manos de las Brigadas Rojas del dirigente de la Democracia Cristiana italiana Aldo Moro, ocurrido hace 21 años, sigue reservando sorpresas a los investigadores y a la siempre incrédula opinión pública italiana. La última consiste en la sospecha de que el pianista y director de orquesta Ígor Markevitch cedió su villa de Florencia al Comité Ejecutivo brigadista para sus reuniones durante los 55 días de secuestro. Altos cargos de la policía y la política italiana aceptan tal posibilidad.

Esta nueva hipótesis investigadora fue iniciada por la fiscalía de Brescia y ha sido considerada "seria" por el presidente de la Comisión de Atentados del Parlamento italiano, Giovanni Pellegrino: Ígor Markevitch, nacido en Kiev en 1912 y muerto en Francia en 1983, cedió su villa florentina a los terroristas para sus reuniones ultrasecretas.La posibilidad, avalada por altos cargos de la policía e importantes exponentes políticos italianos, encontró ayer fuertes resistencias por parte de un experto en el caso Moro, Sergio Flamigni, exdiputado comunista de 74 años. "O se trata de una cosa seria y entonces, a la vista de que la investigación está en marcha, hubiera sido preferible callar, o se trata de un informe del Sismi (servicio secreto militar) de 1980, y es un completo embuste", declaró Flamigni, que ha sido miembro de las comisiones parlamentarias de investigación del asesinato de Aldo Moro, la Logia Masónica P-2 y de la comisión Antimafia.

Para Oleg Caetani, hijo de Markevitch y su segunda esposa, la italiana Topazia Caetani, la implicación de su padre "es un colosal error". Caetani, de 44 años, director de orquesta, declaró al Corriere della Sera que su padre ni siquiera tenía casas.

El caso Moro, con su constelación de misterios, ha reaparecido a raíz del asesinato, el jueves 20 de mayo, de Massimo D"Antona, asesor del ministro de Trabajo, Antonio Bassolino, atentado del que se han responsabilizado las denominadas Nuevas Brigadas Rojas.

Las investigaciones del asesinato de D"Antona, que se produce 11 años después del último atentado mortal de las Brigadas Rojas, han puesto de relieve, según numerosos responsables de los servicios de seguridad y la política italiana, la existencia de una conexión entre la vieja organización terrorista de extrema izquierda y una nueva fracción. El sábado, 200.000 personas se manifestaron en Roma y Bolonia contra esta nueva eclosión terrorista.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_