La Yerbabuena cierra con éxito cuatro noches de baile en Madrid
Era un reto casi torero: bailar cuatro noches seguidas en el Teatro Albéniz de Madrid (dentro del festival Madrid en Danza). La bailaora granadina Eva La Yerbabuena llenó y triunfó los cuatro días, y ha convertido su espectáculo, Eva, en uno de los éxitos más relevantes del flamenco reciente.Hay varias pruebas evidentes que demuestran eso: los llenos diarios, los clamores de cada noche, la satisfacción de la compañía... Y un pequeño ejemplo, que sucedió tras la última representación, el sábado. El maestro alemán Hans Werner Henze, unode los mitos del teatro muscial del siglo, que estrena esta semana en el Teatro Real su ópera The bassarids, acudió al Albéniz junto a Mauricio Sotelo, y quedó tan conmovido por lo que vió que le dijo en español a la bailaora: "Muchas gracias por esta experiencia tan emocionante".
Es cierto que Henze anda "loco" por el flamenco, pero incluso los aficionados más templados han elogiado la carga de emoción y verdad de un montaje que está ya en gira por España (ayer visitó El Escorial y mañana viajará a Oviedo).
La Yerbabuena hace un baile desnudo de artificios y de demagogia (no hay casi zapateados ni desplantes), búsqueda de la jondura y el pellizco, mezcla de delicadeza y fuerza, de contemporaneidad y clasicismo, repaso a palos nada habituales como la granadina. El mundo flamenco habla con admiración de Eva, aunque antes de su última cita la bailaora seguía nerviosa en camerino: "Disfrutar es muy difícil, esto siempre es un lío".
En el espectáculo, que dura una hora y 15 minutos, llega a haber 16 personas en escena. Con la guitarra de su marido Paco Jarana al frente, La Yerbabuena sale arropada por otro tocaor, dos percusionistas, una flauta y un magnífico cuadro de cantaores: Enrique Soto, Segundo Falcón, Enrique el Extremeño, la gran promesa onubense Arcángel y -los dos primeros días- Marina Heredia. La Yerbabuena se pone a oírlos y luego a bailar. Como dijo Carmen Linares emocionada, "ésa es la diferencia: Eva escucha y luego baila".
Babelia
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