De Palacio: "Se habla más del lino que de Kosovo"

La ex ministra de Agricultura Loyola de Palacio se quejó ayer en Barcelona de que algunos medios de comunicación se estén preocupando en exceso estos días del escándalo del lino y que planteen debates "sobre la ética y la estética" de las dimisiones de tres altos cargos del departamento que ella dirigió hasta que fue nominada candidata europea del PP. Según De Palacio, el caso del lino se ha situado informativamente "por delante del drama humano y las miles de personas perjudicadas por las violaciones de los derechos humanos en Kosovo". "Es asombroso", señaló.La ex ministra reiteró, frente a las acusaciones de la oposición, que en este caso "la única trama que hay es la del PSOE" para montar lo que descalificó como una "campañita" que producirá "daños colaterales" en el sector.

La candidata, sorprendentemente, tenía ganas ayer de hablar de las polémicas subvenciones millonarias al cultivo del lino, pese a que han chafado sus planes para construir una campaña electoral con discursos sobre sus múltiples proyectos europeos. Ella no se siente nada cómoda con este asunto, pero ayer, en Barcelona, durante una concentración de deportistas que apoyan en estos comicios al PP, se explayó respondiendo sin prisas a todas las preguntas que se le planteaban. No aportó muchos datos nuevos, pero sí varios lamentos.

De Palacio no acepta de buen grado que se diga que el caso del lino se ha cobrado ya tres dimisiones de altos cargos. Sostiene que tan sólo ha habido una renuncia relacionada con el lino, la del presidente del Fondo Español de Garantía Agraria, Nicolás López de Coca, y argumenta que la del director financiero de Mercasa, Gonzalo Ruiz Paz, es un abandono personal harto de acusaciones falsas. Respecto al últino abandono, el del secretario general del FEGA, Pedro Antonio Linares, dice que tiene que ver con la llegada de la nueva presidenta, que quiere nombrar a una persona de su confianza.

Decencia política

En este contexto, la ex ministra de Agricultura amagó varias veces con revelar presuntos trapos sucios de las comunidades gobernadas por el PSOE (Castilla-La Mancha, Extremadura y Andalucía), a las que achaca la máxima responsabilidad política, técnica y de gestión en las posibles irregularidades en torno a las ayudas europeas al lino.

Dijo que dispone de expedientes facilitados por la Unión Europea contra la actuación de estas comunidades, pero añadió que no los facilitaría por decencia política. Fue ahí cuando la ex ministra y candidata europea ligó las acusaciones que pesan sobre su gestión y la de sus ex colaboradores con el debate "ético y estético" de la compatibilidad de ser a la vez alto cargo de la Administración y agricultor del lino a tiempo parcial perceptor de subvenciones millonarias de la Unión Europea.