Díez apela a la "valentía" de De Palacio para mantener un debate a dos

Rosa Díez, cabeza de lista del PSOE al Parlamento europeo, apeló ayer a la "valentía" de su adversaria del PP, Loyola de Palacio, para que sostenga con ella un cara a cara público en el que cada una explique a los ciudadanos su idea de Europa. Los socialistas están convencidos de que el PP no quiere dar bazas a Díez, teniendo en cuenta que el nombre de la ex ministra de Agricultura les suena mucho más. Además, la candidata socialista defendió a sus compañeros eurodiputados atacados por votar contra la Agenda 2000.

"He oído decir al PP que no quieren que tenga un debate con Loyola de Palacio porque yo lo que pretendo es que me conozcan; pues sí, a mí no me importa que me conozcan, y tenía a Loyola de Palacio por una mujer valiente, pero si continúa ocultándose tendré que cambiar de opinión", dijo Díez en una rueda de prensa en la sede federal del PSOE.El PP arguye que un debate a dos resultaría discriminatorio para el resto de las fuerzas y que no hay por qué enfrentar en exclusiva a las representantes del PP y del PSOE porque el 13 de junio no se celebran elecciones generales en las que hay que elegir a un presidente del Gobierno.

Díez rebatió esto último: en 1996 hubo elecciones generales y José María Aznar se negó a debatir con Felipe González. La candidata socialista acepta que pueda haber debates a varias bandas pero cree necesario uno a dos porque ella y Loyola de Palacio representan a los dos partidos que votan "ocho de cada diez ciudadanos".

Pero la razón fundamental de la comparecencia que ayer realizó Díez tenía que ver con su interés en defender a los eurodiputados socialistas que han sido tachados por el PP de "miserables", en expresión de su portavoz, Rafael Hernando, por haber votado en contra de las perspectivas financieras de la Agenda 2000 aprobadas en la cumbre de Berlín. De Palacio afirmó que si ese voto hubiera cundido se habrían puesto en peligro los intereses de España. También recibieron los reproches del presidente del Gobierno, José María Aznar.

Díez arguyó que esos presupuestos europeos van a quedar obsoletos en breve, entre otras cosas, porque los países de la Unión Europea tendrán que habilitar más pronto que tarde recursos excepcionales para hacer frente a la devastación que causa la guerra de los Balcanes. Para Díez, en la cumbre de Berlín se negoció pensando más en clave nacional que europea y, a su juicio, "España perdió y Europa también".

La candidata socialista considera que los eurodiputados españoles tan sólo trataron de mostrar una actitud de rechazo "testimonial" ante unos presupuestos que no les gustan. Quiso demostrar que en esa cumbre Aznar estuvo "obsesionado" por no quedarse atrás de lo que consiguió Felipe González en la cumbre de Edimburgo en 1992. Pero obtuvo menos, insistió Díez. En Edimburgo España consiguió el 55% de los 21.000 millones de euros con los que se dotó el Fondo de Cohesión, que se creó en esa cumbre a instancias de González. En Berlín España obtuvo el 62% de los 18.000 millones de euros de ese Fondo: unos 11.106 millones de euros para el septenio 2000-2006 frente a los 11.500 millones de euros que se lograron en 1992.