El garaje de Laguardia costará 100 millones más para que se pueda proteger el estanque celtibérico
Construir un aparcamiento subterráneo en Laguardia y conservar en el mismo lugar el importante estanque celtibérico es compatible. Así lo ha demostrado el nuevo proyecto, que el miércoles se comenzó a ejecutar. Con respecto al estudio inicial, las nuevas modificaciones aumentan el presupuesto de la obra en cien millones de pesetas e implican una reducción mínima del número de plazas previstas en principio. La conservación del estanque se ha resuelto, pese al recelo inicial del alcalde y a las irregularidades cometidas por el Departamento de Cultura de la Diputación.
Hace tan sólo cuatro meses no parecía factible la conservación del estanque y la construcción de un garaje en Laguardia, en el lugar conocido como La Barbacana. La Diputación de Álava abogó por destruir la balsa celtibérica, un monumento único en Europa, según los expertos en arqueología. El propio alcalde de Laguardia, el popular Javier Sampedro, mostró su oposición a que se protegiera el estanque, datado en el siglo II antes de Cristo. Llegó a asegurar que pediría un contrainforme técnico, con tal de que el aparcamiento se pudiera construir a la mayor celeridad. Al intervenir el Gobierno vasco y ordenar la conservación del monumento, los planes del Ayuntamiento y la Diputación tuvieron que cambiar. Se ha modificado el proyecto inicial con el fin de proteger el espacio. Finalmente, podrá compatibilizarse todo: la construcción del garaje, de las viviendas, de una residencia de la tercera edad y la conservación del estanque. El aparcamiento tendrá cuatro plantas en vez de las tres previstas en el plan original. Así se compensa el espacio que ocupa el monumento. El nuevo proyecto deja las 457 plazas de garaje en poco más de 420. La principal modificación está en el capítulo económico porque el antiguo presupuesto de 540 millones de pesetas se eleva en cien millones. En principio, el sobrecoste debe ser pagado por el promotor, es decir, el Ayuntamiento de Laguardia, aunque el alcalde adelantó ayer que solicitará la ayuda de la Diputación y Arabarri, la sociedad pública que potencia la rehabilitación de centros históricos. La construcción se elevará por encima del estanque mediante una solución de columnas que sujetarán la estructura. El pasado miércoles comenzaron los primeros trabajos en el lugar que ocupará el garaje. Javier Sampedro se felicitó ayer por el inicio de las obras, pero lamentó "los ocho meses que han estado paradas". Los trabajos en el lugar han seguido un proceso complicado. Terminadas las obligadas catas arqueológicas en la parcela, el director de la excavación emitió un informe en el que subrayaba la importancia del hallazgo. El Departamento de Cultura de la Diputación, en cambio, solicitó la destrucción del estanque y, según el propio arqueólogo, se le indujo a tomar partido en favor de esa opción. El grupo socialista criticó por esto al diputado de Cultura, Mikel Mintegi (EA), y anunció que llevaría el caso a la fiscalía. El diputado se comprometió el pasado 29 de marzo a entregar toda la documentación sobre este asunto, pero, según aseguró ayer el PSE, más de un mes después aún no la ha recibido.
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