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El descubrimiento de una especie de hace 2,5 millones de años completa la historia del hombre

Unos fósiles de animales indican que estos seres primitivos usaban instrumentos de carnicería

Hace 2,5 millones de años, unas criaturas de menos de metro y medio de altura, con un cerebro tres veces más pequeño que el nuestro y con brazos largos como los monos, pero ya con piernas largas como los hombres, vivieron en el noreste africano y, probablemente, fueron los primeros seres entre nuestros antepasados que usaron instrumentos de piedra para descarnar animales. Esas criaturas pertenecían a una especie desconocida hasta ahora (Australopithecus garhi) cuyos fósiles han sido descubiertos en Etiopía por el destacado paleontólogo estadounidense Tim White y sus colegas etíopes.

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La región etíope del Medio Awash es hoy un desierto inhóspito en el que vive el pueblo Afar. Pero hace 2,5 millones de años allí había vegetación, un lago y muchos animales hoy extinguidos, incluidos unos homínidos cuyos restos fósiles fueron descubiertos, entre 1996 y 1998, por un equipo de 40 científicos, dirigidos por Tim White (Universidad de California en Berkeley) y el etíope Berhane Asfaw. La combinación en los fósiles de rasgos simiescos (como los brazos largos) con otros más humanos (las piernas largas), además de las características dentales, fue toda una sorpresa para los científicos, y con el vocablo "sorpresa" (garhi, en la lengua de los Afar) han bautizado la nueva especie, que presentan hoy en la revista Science. Por si fuera poco, los investigadores han encontrado allí fósiles de animales con marcas de haber sido descarnados con instrumentos de piedra y con fracturas en los huesos hechas para acceder al nutritivo tuétano. Los investigadores advierten que no pueden concluir rotundamente que los individuos de la nueva especie fueran los autores de las carnicerías de antílopes y caballos, pero los indicios se orientan hacia esa conclusión, con lo que estaríamos ante la prueba más antigua conocida de utilización de herramientas por los antepasados del hombre.

A. garhi apunta directamente a una de las cuestiones más candentes de la paleoantropología: ¿En qué rama de la evolución aparecieron los primeros humanos? Aunque los fósiles encontrados en África desde los años veinte han permitido a los paleontólogos definir a grandes rasgos el devenir de la evolución humana, se mantienen intensos debates acerca de la relación entre especies en algunos puntos clave.

Uno de estos episodios cruciales es el paso de los australopitecos - animales ya bípedos pero parecidos a monos- a los primeros seres del género Homo, el Homo habilis de hace unos dos millones de años. Precisamente en este punto oscuro hasta ahora se inscribe A. garhi.

Pequeño cráneo

White es uno de los paleontólogos más famosos del mundo, un científico que compagina su trabajo en el laboratorio con largas campañas de campo en África en busca de fósiles, búsqueda recompensada con trofeos sensacionales a los que ahora añade A. garhi. "La nueva especie es muy parecida a su antepasado afarensis", explica White. "El rostro se proyecta hacia adelante, la caja craneal es pequeña y con cresta, pero los premolares y los molares son enormes. Nunca se había visto antes esta combinación de rasgos y por eso hemos nombrados una nueva especie". Él mismo advierte que todavía faltan pruebas concluyentes para asegurar que A.garhi es el ancestro directo del género Homo, incluido el hombre moderno, "pero es muy posible", dice. El descubrimiento ha sido muy laborioso en el desierto etíope, asegura el equipo. Los primeros fósiles aparecieron en 1996 cerca de Bouri: huesos de brazo y de pierna de un pequeño homínido. Después se encontró medio esqueleto. A unos 275 metros del primer lugar hallaron después un fragmento craneal de otro individuo. En total, el grupo de White y Asfaw ha sacado a la luz restos de seis homínidos, datados en 2,5 millones de años.

A poca distancia de los huesos, y con la misma antigüedad, aparecieron los fósiles de animales con marcas de discernimiento - inconfundibles estrías en forma de V que hace el filo de una piedra y que no hacen los dientes de un animal- y fracturas hechas con herramientas para extraer la médula ósea.

Estos fósiles animales apuntan hacia la solución de un enigma: unas piedras talladas de hace 2,6 millones de años fueron encontradas en Gona (en el Awash Medio) hace poco, pero nadie se atrevía a especificar su uso. El nuevo hallazgo aclara que las herramientas permitían a los homínidos "acceder a todo un mundo nuevo de alimentos", afirma White en Science.

Los nuevos métodos para hacerse con grandes cantidades de recursos alimenticios de alta calidad (carne y tuétano) mejorarían la capacidad de nuestros antepasados para alimentarse ellos y sus crías. "El desarrollo de tecnologías de instrumentos de piedra permitieron esta revolución en la dieta", dice White. "Esto es la evidencia más antigua de una adaptación clave que condujo a nuestros antepasados a la dispersión fuera de África".

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